Nació un 17 de abril de 1.920, y por estas cosas del covid-19, Martina Lancharro Conejo está pasando el confinamiento domiciliario junto a su hijo en Sevilla. Desde allí, llena de vitalidad, Martina ha querido enviar un saludo muy especial a todos sus familiares, amigos y vecindario, con palabras de ánimo: “Esta epidemia la vamos a superar desde casa”, asevera nuestra protagonista, en un vídeo remitido a Radio Monesterio.
Mujer luchadora, como casi todas la de su generación, vivió en primera persona una guerra civil y una no menos dura postguerra. Costurera y esposa de albañil, se considera toda una afortunada. Su salud es envidiable. “Es totalmente autosuficiente”, cuenta su hijo José. No necesita ayuda para su aseo personal, disfruta leyendo, hace su cama, y es totalmente consciente de la situación actual de crisis sanitaria que estamos padeciendo. Le gusta la política, “sigue con muchísima atención los telediarios”, narra su hijo. Su única dificultad es la sordera, aunque esta situación en absoluto la mantiene aislada.
Cumpleaños
Este viernes está siendo muy especial para Martina. Se ha roto por completo la monotonía de lo que hubiera sido un día más de confinamiento. Llamadas telefónicas de amigos y familiares, vídeos de ánimo, e incluso la felicitación institucional, por parte del ayuntamiento. Tampoco faltará la tarta y el brindis, con el deseo de “superar pronto esta pandemia”. Nada más que todo esto pase, volverán a Monesterio, a su casa de la calle Primero de Mayo, y entonces podremos abrazar y felicitar personalmente a Martina, abuela de Monesterio y de la comarca de Tentudía, que el año pasado le rindió público homenaje por su longeva condición.
