1.774.882 euros. Es la cantidad que el Ayuntamiento de Badajoz va a destinar a distintas medidas de acción social durante los próximos meses con motivo de la crisis provocada por el coronavirus y que incluirá tanto ayudas directas a instituciones que trabajan con colectivos desfavorecidos, como potenciación de programas que se desarrollan desde los servicios sociales municipales. Esta cuantía se añade al presupuesto del Instituto Municipal de Servicios Sociales (IMSS), que ronda los 5 millones de euros, a través de una modificación presupuestaria que puede realizar directamente el alcalde, Francisco Javier Fragoso, según acaba de explicar.

616.000 euros se destinarán a ayudas económicas directas para la alimentación de familias sin recursos; 153.000 para reforzar y contratar más personal para llevar a cabo las nuevas políticas sociales que sean necesarias (trabajadores sociales y personal administrativo) y 135.500 euros para colectivos que trabajan con los sectores afectados (los dos comedores sociales, el Banco de Alimentos, el economato social, Provida, Cáritas y los dos asilos). Asimismo, el plan contempla una partida de 610.000 para mantener el servicio de comida a domicilio para personas mayores en mayor situación de vulnerabilidad, sobre todo económica; 75.000 euros para incrementar los programas de ayuda a domicilio y teleasistencia y 15.000 euros para llevar a mayores con dificultades de movilidad los servicios de podología y de peluquería que funcionaban en los centros de mayores, ahora cerrados. Otra gran partida es de 450.000 euros es para el programa de Respiro Familiar, que colabora con aquellos trabajadores que se incorporan a su puesto de trabajo y carecen de recursos para atender a niños o mayores a su cargo, y otros 100.000 euros para adaptar los centros de mayores para que puedan seguir prestando servicios con los nuevos requisitos que establece la situación sanitaria.

El alcalde pacense acaba de anunciar que es el primer paso dentro de las acciones que contemplará el Plan de Impulso, que incluye acciones sociales y de ayuda a la actividad económica y empresarial (a comerciantes, autónomos, planes de dinamización de sectores y reactivación de las obra públicas). El plan de medidas sociales está marcado por la limitación que establece el Gobierno central en función de los resultados económicos del ejercicio anterior y que es al 20% de los recursos que se pueden detraer del resultado presupuestario del 2019 para destinarlo a políticas sociales. Una vez que la Intervención municipal ha marcado la cifra, los profesionales han marcado las prioridades y necesidades que prevén. Fragoso ha defendido que van a destinar "hasta el último euro que permite el Gobierno".