El alcalde de Liverpool, Steve Rotheram, ha pedido este jueves que se inicie una investigación en torno al motivo que llevó a que se jugara con normalidad, con presencia de 3.000 aficionados españoles, el encuentro de Liga de Campeones entre el Liverpool y el Atlético de Madrid y su incidencia en la propagación del coronavirus en la ciudad inglesa.

"Si la gente se ha contagiado como resultado directo de un evento deportivo que creemos que no debería haberse celebrado, es escandaloso", dijo Rotheram en declaraciones a la cadena británica BBC.

Mientras en España ya se recomendaba no realizar viajes innecesarios y estaban prohibidas las concentraciones masivas de gente (el fútbol se iba a jugar sin público, antes de la suspensión), las autoridades inglesas no declararon el partido a puerta cerrada y permitieron la llegada masiva de aficionados. "No solo se puso en peligro a los aficionados, sino también a todos los trabajadores sanitarios y a sus familias que lo pueden haberlo contraído", amplió Rotheram.

Incremento de casos

Hasta el momento, han muerto 246 personas como resultado del coronavirus en los hospitales de Liverpool con un total de más de 1.200 contagiados. "Hemos visto un incremento en la curva de infección. Eso necesita ser investigado para descubrir si algunas de esas infecciones están directamente conectadas con los aficionados del Atlético. No tenían permiso para reunirse en su propia ciudad, pero vinieron a la nuestra y pueden haber esparcido el virus", añadió el político.

El encuentro, que se disputó el 11 de marzo, congregó a cerca de 3.000 aficionados españoles en Liverpool y ha sido criticado ya en varias ocasiones en el pasado por su relación con la propagación del coronavirus. Ya a principios de mes, el director de salud pública de Liverpool, Matthew Ashton, aseguró que el aumento de casos de coronavirus en la ciudad podía haber estado influido por el partido ante el Atlético de Madrid.