Las comunidades autónomas no ven necesario pedir al Gobierno central un Estado de Alarma individualizado en sus respectivos territorios ante la crisis del coronavirus aunque, en algunos casos, no han cerrado la puerta a tomar esta decisión en un futuro si la situación de la pandemia se agrava.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha invitado este martes a los presidentes autonómicos que lo consideren necesario a que pidan la declaración del estado de alarma en sus respectivos territorios o en una parte de ellos, y se ha comprometido a apoyarlo y defenderlo en el Congreso.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha señalado que "no se puede pasar del estado de alarma a la nada, a la ausencia, como ha ocurrido durante este verano, y de la nada y la ausencia otra vez al estado de alarma". No obstante, ha afirmado que solicitará "todo aquello que haga falta si sirve para proteger la salud de los ciudadanos".

Precisamente, desde el PP, Pablo Casado, asegura que Sánchez "se escabulle en las comunidades autónomas" y ha insistido en la posibilidad de reformar por la vía de urgencia la Ley Orgánica de medidas de Salud Pública para evitar la aplicación de esta excepcionalidad constitucional. Este miércoles, reúne a sus barones a los consejeros y portavoces de Sanidad y Educación del PP. Sobre la gestión de las comunidades autónomas, muchas de las cuales criticaron el mando único y exigieron recuperar competencias, Casado ha dicho que aquellas gobernadas por el PP "han ido por delante" en la gestión sanitaria, citando Murcia, Galicia, Andalucía, Castilla y León y la Comunidad de Madrid con medidas como la realización de 'tests' masivos, las limitaciones de aforo o la prohibición de fumar en espacios públicos.

Más negativas

Por su parte, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha advertido al jefe del Ejecutivo de que la solución "no es ofrecer" a las Comunidades Autónomas el estado de alarma para su territorio y le acusa de "echarse de nuevo a un lado". "Llevamos meses pidiendo una herramienta sin tener que recurrir al estado de alarma", ha explicado en su cuenta oficial de Twitter. En este sentido, el vicepresidente del Ejecutivo castellano y leonés, Francisco Igea, ha recordado que la ley del estado de alarma se prevé para problemas que no vayan más allá de la propia comunidad, por lo que, a su juicio, "no es el caso" de la situación actual. Ha insistido en que lo que les ha ofrecido el presidente del Gobierno es una herramienta "que ya existía".

En el caso de Baleares, la portavoz del Govern, Pilar Costa, ha explicado que ya cuentan con las herramientas necesarias para aplicar las medidas de control que se van decidiendo a través de las diferentes resoluciones de la Consejería de Salud, aunque no se ha referido a la posibilidad, presentada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de solicitar la declaración del estado de alarma.

Más contundente ha sido el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que ha descartado el ofrecimiento de solicitar el estado de alarma y ha declarado que "espera" no hacerlo "nunca" porque "la economía no debe pararse" y el Sistema Cántabro de Salud está "perfectamente preparado" para afrontar un incremento de casos. "Aquí no vamos a decretar ningún estado de alarma", ha zanjado.

En esa misma línea se ha pronunciado el presidente de Aragón, Javier Lambán, quien ha rechazado pedir la aplicación del estado de alarma en la región. A su entender, tanto esta medida, como el confinamiento son la solución "fácil" porque "se ataja la trasmisión", pero "luego rebrota y entretanto se ha asfixiado la economía y el empleo" y "no quiero eso".

El Gobierno de la Región de Murcia también ha descartado por el momento solicitarlo al Ejecutivo central porque la comunidad se sitúa por debajo de la media nacional "en incidencia, hospitalización e ingresos en UCI", informaron fuentes de la Consejería de Salud en un comunicado.

El consejero de Presidencia y Hacienda de Murcia, Javier Celdrán, ha lamentado que Sánchez "haya eludido su responsabilidad y haya optado por dejar solas a las comunidades ante la nueva oleada de la pandemia, sin ofrecer ninguna solución más allá de la propaganda a la que nos tiene acostumbrados".

Con respecto a Cataluña, la consejera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés, ha asegurado que el ofrecimiento del presidente del Gobierno "no es una herramienta imprescindible", y ha señalado que el Ejecutivo catalán ya activó en marzo un plan de emergencia. "No lo vemos en absoluto necesario para añadir una cosa más. Tener que explicar medidas, ya lo vivimos en las fases. A quien tenemos que dar respuesta es a la ciudadanía", ha añadido.

Sin embargo, el presidente de la Generalitat catalana ha afirmado que estudiará la propuesta del Gobierno y ,una vez conozca todos los detalles, dará una respuesta al respecto. Fuentes de Presidencia han explicado que Quim Torra ha expresado su sorpresa porque "ahora sí parece que el virus entiende de territorios", y ha recordado que siempre ha pedido todas las competencias para gestionar la crisis sanitaria.

Por último, el lendakari vasco, Iñigo Urkullu, no cree que sea necesario que el Gobierno central decrete nuevamente el estado de alarma y ha defendido la actual coordinación y "comunicación permanente" entre ambos Ejecutivos para hacer frente a la segunda oleada de la pandemia del covid-19, y abordar sus consecuencias en distintos ámbitos "sin necesidad de otro tipo de figuras".