El ayuntamiento pone en marcha un equipo para desinfectar las calles que dan acceso a los colegios e institutos de la ciudad de cara al inicio del curso escolar, que comenzará el próximo 10 de septiembre. Es una de las medidas extraordinarias que llevará a cabo el consistorio para garantizar los protocolos de seguridad derivados de la crisis sanitaria. Se une al plan que ya está diseñando junto a los centros escolares para llevar a cabo la limpieza del interior de los edificios de Infantil y Primaria, uno de los asuntos que más preocupa a los docentes y que es responsabilidad del consistorio.

La concejala de Educación, María José Pulido, y técnicos municipales se reunieron ayer con los equipos directivos de los centros cacereños y con los inspectores de educación para abordar precisamente este asunto. En el encuentro se acordó que a partir del próximo lunes técnicos municipales y de la empresa de limpieza visitarán todos los colegios para conocer las necesidades particulares. En base a ello se intentará elaborar un calendario para realizar la limpieza según los horarios de cada centro. De momento el ayuntamiento no se plantea contratar a más personal y prevé cubrir estos trabajos con los recursos humanos con los que dispone ahora mismo. La idea es que cada trabajador comparta varios centros y se compagine la limpieza en horario matutino y vespertino.

El problema principal se encuentra en la desinfección de los espacios comunes y de los cuartos de baño, que debe realizarse varias veces al día según establece el protocolo redactado por la crisis del coronavirus. De hecho, las aulas comunes deberán limpiarse cada vez que sean usadas por un grupo y antes de que accedan los de otro. Esto supone realizar casi un encaje de bolillos para adaptar las plantillas de los servicios de limpieza a los horarios de los centros, que es en lo que trabaja ahora el ayuntamiento. Antes del coronavirus estos espacios se limpiaban solo una vez al día, una vez que las clases habían finalizado. «Las medidas de limpieza que debemos seguir los maestros en el aula están claras, el problema ahora son las zonas comunes. Las aulas hay que desinfectarlas varias veces y no sabemos cómo se va a desarrollar esto», señala el director del colegio Delicias, Adrián Amarilla, que ayer asistió a la reunión.

El inicio del curso preocupa a la comunidad educativa, que lleva todo el verano elaborando los planes de contingencia y adaptándolos a las nuevas modificaciones. Cabe recordar que son los equipos directivos los que deben diseñar estos planes, adaptando los protocolos a las exigencias de cada centro. Todos están preparados pero, aún así, el inicio del curso preocupa. «Hay preocupación e inquietud porque una cosa es plasmar los planes sobre papel y otra muy distinta es la realidad. No sabemos cómo van a funcionar el día que lleguen nuestros niños», advierte el director del Delicias, Adrián Amarilla. Hay que tomar temperatura, desinfectar las manos, los pies,… Y procurar que no haya aglomeraciones a las entradas y salidas. Ellos las han escalonado para que se lleven a cabo por cursos pero cómo funcione es una incógnita. «El plan está elaborado pero luego allí están los padres esperando y es imposible medir eso», insiste.

BALDEO DE VÍAS PÚBLICAS

Por otro lado, el ayuntamiento prepara además otro equipo que se encargará de la desinfección de las calles cercanas a los puntos más críticos, como son los hospitales, los centros de salud y las residencias de mayores. La desinfección de las calles es algo que se lleva haciendo desde que comenzara la crisis sanitaria.

Los equipos de baldeo, explica el ayuntamiento a este diario, utilizan desinfectante en las vías públicas. En la parte antigua, por ejemplo, se usa hipoclorito que ayuda además a controlar las hierbas que crecen en el asfalto. En esta zona, añade el consistorio, la desinfección se realiza una o dos veces por semana; en el resto de la ciudad se lleva a cabo según la programación. El ayuntamiento recuerda, no obstante, que estas medidas tienen «una eficacia muy limitada» por lo que es importante cumplir las medidas de seguridad: Ponerse la mascarilla, mantener la distancia social e higiene de manos. «Es lo único que funciona», aclara.