Badajoz se blinda para hacer frente al coronavirus. El alcalde, Francisco Javier Fragoso, ha anunciado esta mañana que el ayuntamiento cerrará las instalaciones deportivas, incluidas las piscinas, las asociaciones de vecinos, los centros de mayores, la perrera, los museos y salas de exposiciones municipales y los espacios juveniles. Además, se suspenden los cursos de la Fundación Municipal de Deportes (FMD) y de la Universidad Popular de Badajoz (UPB), los conciertos de la Banda Municipal de Música y se reforzará el control de aforo en los servicios municipales, pues, de momento, se descarta el teletrabajo para los empleados municipales.

También se reforzarán las tareas de desinfección del mobiliario urbano y, cuando la temperatura lo permita, se baldearán las calles, y se contactará con los responsables de los grandes supermercados para que intensifiquen la vigilancia sobre los aforos en sus establecimientos y sean "escrupulosos" con su cumplimiento.

Fragoso ha reconocido que la transmisión de la covid-19 está "descontrolada" en la región, y por ende, en la ciudad, por lo que ha llamado al "confinamiento voluntario" y a limitar la movilidad a lo imprescindible "para que esta no sea una semana perdida, sino clave para evitar los contagios", ha dicho.

Para el alcalde de Badajoz, las medidas anunciadas ayer por la Junta son "insuficientes" y, en su opinión, no conducirán a solucionar el problema si no hay una responsabilidad colectiva. En este sentido, ha considerado que el cierre perimetral de Badajoz, con las tiendas y la hostelería ya cerradas, apenas reducirá la movilidad entre un "1 y un 2%", pues quienes se desplacen hasta la capital pacense lo harán por motivos que entran dentro de los que se consideran justificados. Además, ha pedido que se recurra al Ejército para controlar los accesos a la ciudad, para que así las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la policía local se puedan dedicar a vigilar las conductas "que pueden poner en peligro la salud de los vecinos", como las intervenciones de ayer y de hoy en restaurantes de dos áreas de servicios que estaban abiertos al público en general pese a la orden de cese de actividad de la hostelería. "No cabe la trampilla, porque el tramposo y el pícaro está generando un peligro global y la policía local está para controlar eso, no para preguntar a quienes vienen en sus coches", ha defendido.

Además, Fragoso ha solicitado que el toque de queda para los menores de 16 años se adelante, y no sea como para los demás a las 22.00 horas, para tratar de evitar este tipo de reuniones, que son más difíciles de controlar.

Subvenciones

Asimismo, el alcalde ha informado de que desde hace una semana el equipo de gobierno está trabajando para poner en marcha una línea de ayudas dotada con entre 1 y 1,5 millones de euros para la hostelería y el comercio, con el objetivo de contribuir a paliar las consecuencias del cierre decretado por la Junta la semana pasada y que ayer se prorrogó. Fragoso ha señalado que se tratará de que el procedimiento sea "simplificado", tras las las quejas recibidas de autónomos y pymes por la complejidad para tramitar las anteriores subvenciones municipales para los negocios afectados por la covid-19.

PSOE

Sobre las ayudas, el portavoz del grupo municipal socialista, Ricardo Cabezas, que ha comparecido tras el alcalde, ha tildado de "cutre" la iniciativa, al considerar insuficiente esta cantidad, que ha pedido que se eleve a 4 millones de euros. El PSOE también ha demandado otra línea de subvenciones con 700.000 euros para familias vulnerables.

Cabezas ha reprochado al alcalde que critique el cierre perimetral implantado por la Junta o que se atreva a cuantificar la repercusión que tendrá sobre la movilidad sin ser "un experto", al tiempo que ha reclamado que a las medidas anunciadas por el alcalde se sume la de intensificar las labores de desinfección en los colegios de la ciudad y los poblados.