“Fue hacer la petición solidaria a través de un grupo de WhatsApp y de manera, casi instantánea, contar con un centenar de voluntarias para este proyecto”. Amalia Sánchez, concejala de industria del ayuntamiento de Monesterio, explica, con gratitud la “generosidad” del pueblo de Monesterio, “siempre dispuesto a colaborar con quienes más lo necesitan”.

El proyecto, liderado por la Dirección de Salud Pública del Servicio Extremeño de Salud, y coordinado por Jaime Ruíz Peña, promociona todo el material necesario para la confección de batas sanitarias, que según su catalogación son utilizadas en diferentes ámbitos. En el caso concreto de Monesterio, las primeras batas confeccionadas son del denominado “nivel 3” de protección. El material, totalmente esterilizado, consta de “las batas ya cortadas”, que son repartidas entre el grupo de voluntarias, para su confección. El material se recibe y se entrega en una nave industrial cedida por el ayuntamiento.

200 al día

El primer pedido ha sido de doscientas batas, que según manifiesta Amalia Sánchez, “se fabrican en un solo día”, con lo que este grupo de voluntarias podría llegar a confeccionar el doble diariamente, “mientras dure esta situación de crisis sanitaria, o hasta que el Servicio Extremeño de Salud considere oportuno mantener la producción”.

La concejala de industria ha reiterado el “agradecimiento” al grupo de voluntarias, así como a todas aquellas personas que “han querido seguir sumándose a esta iniciativa”, para la cual lo único que se necesita es “saber coser, disponer de máquina” y querer dedicar parte del tiempo de confinamiento domiciliario en algo “tan gratificante como ayudar a proteger a nuestro personal sanitario”, concluye Amalia.