El decreto del estado de alarma aprobado el pasado 25 de octubre para luchar contra la propagación del coronavirus dicta que los presidentes y presidentas autonómicos serán las autoridades competentes delegadas en sus respectivos territorios, y podrán decidir el nivel de aplicación de las medidas de este decreto según su situación. De este modo, cada comunidad ha adoptado medidas más o menos duras. En algunos lugares se han decretado cierres perimetrales, y en otros, como en Asturias, el cierre de toda actividad no esencial. Y, como excepción, en Canarias se pide a todo aquel que entre en las islas haberse sometido a una prueba PCR entre 48 y 72 horas antes de su llegada.

Los primeros quince días de toque de queda nacional finalizaron anoche, pero todas las comunidades han prolongado o incluso incrementado esas medidas.

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Es el caso de Andalucía, que desde hoy mismo prohíbe la movilidad entre municipios, lo que se suma al cierre perimetral de toda la comunidad. El Gobierno de Juanma Moreno (PP) ha ordenado el cierre de toda actividad no esencial desde las 18.00 horas, con excepción de Granada, que el domingo por la tarde se convirtió en la primera provincia andaluza en cerrar hostelería, comercio y ocio. Respecto al toque de queda, en la comunidad andaluza está fijado entre las 22.00 y las 07.00 horas.

En Aragón, el toque de queda se retrasa una hora, hasta las 23.00 horas, y se levanta a las 06.00 horas. También se ha establecido un cierre perimetral de la comunidad y se ha decretado el cierre de las ciudades de Huesca, Zaragoza y Teruel. La hostelería y el comercio no podrán permanecerá abiertos más allá de las 20.00 horas, lo mismo que las actividades culturales, sometidas al mismo horario.

Asturias es una de las comunidades que han tomado medidas más contundentes, como el cierre de toda actividad no esencial durante al menos quince días. No se puede entrar ni salir sin una causa justificada, y en el interior se han establecido los cierres perimetrales de Oviedo, Gijón y Avilés.

En las Islas Baleares se ha prestado especial atención a Ibiza, donde se ha cerrado el interior de los bares, se prohíbe el uso de las barras y se reduce a un 50 por ciento el aforo de las terrazas de hostelería, que deben cerrar a las 22.00 horas, cuando empieza el toque de queda. En el resto de Baleares el toque de queda es una hora más tarde y tan solo se ha establecido el cierre perimetral de Manacor, en Mallorca.

Canarias es donde mejor situación epidemiológica tienen y, por tanto, la única medida restrictiva es el cierre de hostelería a la una de la madrugada, salvo en Tenerife, que deben cerrar una hora antes y donde las reuniones están limitadas a un máximo de 10 personas. Eso sí, para entrar en las islas es necesario haber dado negativo en un test PCR entre 48 y 72 horas antes.

Si en Asturias se ha cerrado la hostelería, en Cantabria solo el interior de los bares, y se puede seguir consumiendo en las terrazas. La comunidad vecina impide, eso sí, el tránsito entre sus municipios y ha fijado el toque de queda entre la medianoche y las 06.00 horas.

En Castilla-La Mancha, ese toque de queda se adelanta una hora, hasta las 23.00 horas. La hostelería tiene limitado su aforo al 50 por ciento y se ha prohibido el consumo en las barras, excepto en Toledo, Cuenca y Talavera, donde no se puede consumir en el interior de los locales.

Castilla y León mantiene medidas similares a las asturianas, como el cierre perimetral. Ha adelantado el toque de queda hasta las 22.00 horas y ha cerrado la hostelería y los centros comerciales. El pequeño comercio sigue funcionando.

Cataluña es modelo mixto. Está cerrada y el movimiento entre municipios se prohíbe los fines de semana. La hostelería, los cines, teatros, centros deportivos y centros comerciales permanecen cerrados.

En la Comunidad Valenciana, también con cierre perimetral, la hostelería y el comercio tienen limitado su aforo a un tercio. En los centros comerciales se incrementa hasta el 50%.

El País Vasco es mucho más restrictivo. Además de cerrar todos los municipios, ha clausurado bares, restaurantes y locales de juego hasta el 30 de noviembre; eso sí, el comercio puede abrir hasta las 21 horas.

En Extremadura, los bares no pueden utilizar las barras, pero, al igual que el comercio, pueden ocupar el 40%. Los centros comerciales tienen un aforo menor, del 30%.

Galicia ha tomado la drástica medida de cerrar sus grandes ciudades (Orense, Santiago, Ferrol, La Coruña, Lugo, Pontevedra y Vigo) y otros 53 municipios de sus áreas metropolitanas un mes. También ha cerrado la hostelería, y las reuniones, solo para personas convivientes.

Madrid sigue con restricciones en 41 zonas básicas de salud. En hostelería, el aforo es del 50% en el interior de los locales y del 60% en las terrazas. Además todos los bares tienen que cerrar a medianoche.

En Murcia se ha cerrado la comunidad y está prohibido moverse entre sus 45 municipios. También se ha cerrado la hostelería. Lo mismo en Navarra.

En La Rioja, además del cierre se ha decretado el confinamiento de Logroño y Arnedo, donde se ha cerrado hostelería. En el resto, los bares abren hasta las 22 horas.

Ceuta y Melilla también están cerradas. Además, en esta última se ha puesto hora de cierre a la hostelería a las 21.00 horas, y se ha prohibido el uso de cachimbas, shishas, pipas de agua o similares en la vía pública o en espacios al aire libre, incluidas las terrazas y espacios cerrados de uso público.