Para ir a ver una película al cine habrá que esperar a la segunda fase de la desescalada (a partir del día 25 de mayo, si todo va bien y dependiendo de la delimitación territorial). Lo mismo con el teatro. Ambos espacios culturales deberán vender entradas con butacas numeradas a los espectadores, que, como mucho, podrán llenar solo un tercio del aforo. Se fomentará la venta online de los tíckets, así como el pago con tarjeta tanto en ventanilla como en el bar. Una vez adquiridos las entradas ya no habrá un empleado cortándolas antes de entrar en la sala.

A partir de la fase dos (8 de junio) se ampliará el aforo de los cines y teatros y se permitirá ocupar la mitad de todas las butacas disponibles. La limitación del aforo supondrá para las salas de cine dejar de ingresar unos 43,5 millones de euros al mes, según los cálculos de la Federación de Cines de España (FECE). La patronal, que declara pérdidas globales de 100 millones de euros por la pandemia, ya ha preparado un protocolo, que incluye elevar a la tercera potencia las medidas de higiene.

¿En qué fase de la desescalada podré visitar museos?

¿En qué fase de la desescalada podré visitar museos?Mientras, a partir del 11 de mayo (fase uno) el público podrá visitar los museos, aunque no se podrán organizar actividades culturales. El aforo permitido será de un tercio y el personal de la pinacoteca estará encargado de controlar para evitar posibles aglomeraciones en las diferentes salas. A partir del 11 de mayo también se reactivará la producción cinematográfica y se dará vía libre a los rodajes de películas y series. La industria ha preparado un protocolo, que incluye equipos mínimos, toma de temperatura y constantes medidas de higiene.

¿Cuándo podré comprar un libro en una librería?

¿Cuándo podré comprar un libro en una librería?Las librerías -al igual que todo el pequeño comercio- abrirán sus puertas el próximo lunes 4 de mayo (la llamada fase 0). Siempre habrá limitación de aforo -igual que ocurre con los supermercados- y deberán tener mostrador y mampara para proteger tanto a los empleados como a los clientes. En caso de que no se disponga de estos elementos, la normativa del Gobierno exige garantizar al máximo la protección individual, lo cual incluye la consabida distancia social de un metro o dos y la limitación de aforo. Si lo que se quiere es leer libros en una biblioteca (o acudir a ella para pedirlos prestados) habrá que esperar a la fase dos (11 de mayo), pero también habrá limitación de aforo.

Ante las dificultades que ha atravesado el sector a raíz de la pandemia -sumado a la agresiva competencia de las grandes plataformas de venta online como Amazon y la nula posibilidad de celebrar físicamente el 23 de abril, la Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Librerías (CEGAL) -que reúne a 1.500 locales de toda España- puso hace semanas la campaña Apoya a tu librería para ofrecer a los lectores más fieles la posibilidad de dar cheques regalo para canjearlos por libros una vez termine el desconfinamiento. A pesar de que la fecha inicial de apertura es el 4 de mayo, los responsables de CEGAL consideran que -ante la ausencia de un protocolo oficial para los establecimientos- algunos propietarios se verán en la obligación de esperar al 11 de mayo para tener listas las medidas de protección y poder así abrir sus puertas.

¿Cuándo podré ir de compras?

¿Cuándo podré ir de compras?Inmersas en expedientes de suspensión temporal de empleo, las tiendas de ropa son uno de los sectores más castigados por la actual crisis sanitaria. Al igual que las librerías y el pequeño comercio, darán la bienvenida a sus ansiados clientes a partir del 4 de mayo (fase 0). La patronal está trabajando en protocolos de seguridad para reducir al mínimo el riesgo de contagios. Acotex (asociación empresarial del comercio textil, complementos y piel) recomienda extremar los procesos de limpieza y desinfección, controlar el aforo y mantener la distancia de un metro y medio entre las personas. Habrá dependientes con pantallas faciales y gel desinfectante en cada esquina. Entrará menos gente en los probadores y si alguien devuelve una prenda, esta se guardará unas 28 horas antes de volverla a poner a la venta.

A pesar de todas estas medidas, la patronal no es muy optimista y calcula que las ventas físicas podrían caer en torno al 70% respecto a cualquier mes de mayo normal. Lo más probable es que los locales acorten el horario de apertura al público, al menos durante los primeros meses. Esa reducción hace pensar a la patronal que será insostenible el mantenimiento de todos los puestos de trabajo desde el principio. Mientras, muchas madres y padres esperan como agua de mayo la apertura de tiendas de moda infantil -también partir del 4 de mayo- ya que a muchos niños y niñas la ropa (zapatos incluidos) se les ha quedado pequeña durante el confinamiento.