Nombre: Manal Ouardane.

Localidad: Torremejía.

- ¿Qué significa el Ramadán para ti?

El Ramadán es una experiencia espiritual, deshacerse de todo lo mundano, lo terrenal y centrarte en ti mismo. A los dos o tres días de ayuno te acostumbras, te sientes aliviado y empiezas a priorizar y a tomar decisiones. Es como una Navidad o el Año Nuevo, una ocasión para hacerte nuevas promesas.

- ¿Cómo es el día a día?

Pues desayuno antes de que salga el Sol, un desayuno sin mucha grasa, para no tener sed. A mediodía si es posible me echo una pequeña siesta, para retomar energía y cuando se pone el Sol, la hora Iftar, cenas. Hay una percepción equivocada de que hay que cenar mucho pero es mejor cenar sin excesos. Es un mes en el que trasnochas bastante: hay grupos y charlas en la mezquita.

- ¿Qué diferencia marca el confinamiento?

Este es un Ramadán atípico. Donde más se nota la diferencia es en la reunión y el rezo en la mezquita después de la cena, aunque personalmente no iba. Ahora hacemos videollamadas online con el resto de la familia y los amigos todos los días.

- ¿Qué pides durante tu rezo?

Yo creo que musulmán o no musulmán lo que pedimos es que esta crisis pase cuanto antes y haya el menor número de muertos.

- ¿Esperas poder celebrarlo en comunidad?

No. Por higiene y por salud no es aconsejable ninguna reunión de este tipo. Cuando todo esté más seguro se puede ir hablando.