Italia suma 602 nuevos fallecidos en las últimas 24 horas a la cifra total de muertos por covid-19 que asciende ya a 21.067 personas. A pesar de que la cifra de muertos sigue creciendo por segundo día consecutivo, la cifra de contagiados ha sido la más baja desde el 13 de marzo con 2.972.

Hasta ahora, en Italia se han contabilizado desde el inicio de la epidemia 162.488 casos y sigue siendo el segundo país con más contagios después de Estados Unidos, que lidera la lista de contagios de covid-19.

No reabrirá los colegios

Contrariamente a lo que han decidido algunos países europeos, Italia no reabrirá las escuelas y universidades hasta el próximo curso. Lo que aún está en duda es si el mes de julio será recuperado desde un punto de vista didáctico como ampliación del actual curso.

También parece ya cierto que el año escolar 2019-2020 no terminará con un aprobado general para todos los alumnos, desde primaria hasta la universidad. Sería una injustícia, afirman todas las partes sociales, acordes por una vez.

Educación, asociaciones nacionales de profesores y de directivos de unidades escolares, además de los sindicatos, están debatiendo y organizando en estas horas cómo resolver las numerosas cuestiones vinculadas al cierre didáctico, que afecta a 8,5 millones de alumnos.La cuestión no atañe solo al curso actual, sino tmabién al venidero, ya que se plantean cómo recuperar los meses perdidos. Encima de la mesa la ministra Lucia Azzolina ha puesto tres mil millones para resolverlo, aunque resulta complejo.

Incógnitas del nuevo curso

Entre las hipótesis más acreditadas que se barajan está la de organizar el próximo curso con dos turnos de lecciones, visto que resultaría imposible doblarlas para todos simultáneamente manteniéndolos a una distancia de seguridad (el famoso metro y medio). Al mismo tiempo, dado que no en todos los centros se podría aplicar la medida, la solución a la que se dirigen las autoridades es que, por los menos los primeros meses del próximo curso, constituyan una mezcla de clases orales y clases a la distancia, pero con la idea de que todos, al final, vuelvan a las clases.

La didáctica on line no es democrática, explica Domenico Squillace, presidente del conocido centro escolar Voilta de Milán, ilustrando que no es lo mismo una aula que una mesa de cocina con los famialiares por los alrrededores.

Otra cuestión sobre la mesa, antes de la reapertura, es que todos los alumnos pasen un análisis virológico obligatorio antes de volver a las aulas, para verificar si son positivos al virus. De otro modo no será posible recuperar los retrasos y ayudar a los alumnos menos preparados, subraya Squillace, añadiendo que si se hacen antes los análisis, se evitan los dobles turnos.