«O se toman medidas drásticas o esto no hay quien lo pare». Son palabras del presidente del colegio de médicos de Cáceres, Carlos Arjona, que pide que se tomen de manera urgente decisiones para frenar la propagación del virus ante el repunte considerable de los contagios. La capital cacereña vuelve a situarse otro día más entre los municipios con mayor número de nuevos positivos; ayer se declaró en la ciudad un nuevo brote con 14 afectados y 60 contactos y registró 37 nuevos contagios (el martes hubo 50). En total el área de salud (que incluye a varios municipios del alrededor) sumó ayer 51 positivos.

La situación vuelve a ser preocupante, a pesar de que la presión hospitalaria se mantiene en niveles bajos, con 31 pacientes hospitalizados, uno de ellos en la Unidad de Cuidados Intensivos, según los últimos datos facilitados por la Dirección General de Salud Pública ayer por la tarde. La única forma de evitar que los hospitales vuelvan a saturarse es atajar los contagios, por lo que el presidente del Colegio de Médicos de Cáceres, Carlos Arjona, espera que se adopten «rápidamente decisiones» para combatir la propagación. La misma situación se repite en el resto de la región, donde la incidencia supera ya los 400 casos por cada 100.000 habitantes. «Son los peores datos de la segunda ola y los siguientes van a seguir siendo bastante preocupantes», alertó el presidente del colectivo.

«Es una situación difícil; estamos en el punto más alto de la ola y las perspectivas no son buenas porque seguimos encontrando muchos contactos de grupos relacionados, de amigos y de familias enteras que están contagiadas», advierte Carlos Arjona. «Ha llegado un momento -añade- en el que nos vemos impotentes de la situación que hay, del número tan elevado de casos y de contagios y de personas aisladas; a este ritmo no se puede seguir», asegura.

El presidente del colectivo no es partidario, no obstante, de volver a un confinamiento y se muestra cauto sobre el cierre de la hostelería. «Lo que hay que hacer es un estudio para saber de dónde provienen los contagios y controlarlos. Estamos encontrando grupos enteros de familias y amigos que se están contagiando», dice.

Carlos Arjona hizo estas declaraciones durante una concentración organizada por el Sindicato Médico de Extremadura (Simex), que también preside, en el centro de salud Manuel Encinas, para denunciar el Real Decreto del Ministerio de Sanidad que abre la puerta al ejercicio profesional por parte de facultativos sin especialidad. El colectivo ha convocado una huelga parcial -en horario de mañana- para el próximo 28 de octubre, un día después de la que realizará a nivel nacional.

Arjona criticó que España sea un «coladero» para que médicos procedentes de otros países consigan homologar su título de especialista, lo que se facilita ahora con este real decreto. Por eso, aboga por convocar más plazas MIR para cubrir las vacantes de especialidades con los titulados nacionales. El sindicato apoya la huelga además para pedir mejoras en las condiciones de los facultativos, que están «sobrecargados». «Entendemos a la población que se queje porque no se les atiende, pero los que están dentro de los centros de salud no están cruzados de brazos. Esta huelga es tanto por los pacientes como por los profesionales», añade el sindicato.