El confinamiento no ha hecho desaparecer la violencia de género, es más, está obligando a convivir a víctimas y verdugos. Así lo ha subrayado la Plataforma Feminista de Plasencia, que ha invitado a las feministas de la ciudad a colgar pañuelos morados de sus balcones para que las víctimas sepan "que no están solas".

La plataforma afirma que, "durante estos días de confinamiento obligatorio, estamos viendo que el porcentaje de visualización de pornografía y de pornografía infantil ha subido considerablemente, igualmente las llamadas al 016 se han incrementado y hasta duplicado, se desconocen las cifras del aumento de abusos sexuales y violencias hacia mujeres, niñas y niños dentro de los hogares".

Por eso, "les decimos a todas, nos decimos a todas, que ni están, ni estamos solas, porque estamos las feministas viviendo también en todos los barrios placentinos". Así, sus integrantes están colgando telas o pañuelos morados de ventanas y balcones "para que sepan que ahí estamos para lo que necesiten". A su vez, invitan "a las feministas, a todas aquellas que quieran acabar con la violencia contra las mujeres, a que cuelguen un pañuelo morado en el balcón o ventana. Esta también es una forma de decirles a los maltratadores que de una vez por todas salgan de nuestras casas, de nuestros barrios y de nuestra sociedad".