Más policía en las zonas en los que se producen las ya tradicionales concentraciones de personas durante las cañas navideñas. Aunque ya avanzó esta semana que se extremará el control tras anunciar que no se prohibirá la celebración el 24 de diciembre tal y como publicó este diario, el ayuntamiento precisa que la actuación de vigilancia se centrará en las calles que albergan el grueso de los clientes el mediodía de Nochebuena: la calle Doctor Fleming (Madrila Alta), San Pedro de Alcántara y los obispos y Pizarro, entre otras.
En declaraciones a los medios, el portavoz del Equipo de Gobierno, Andrés Licerán, aseguró que el ayuntamiento ultima ya el dispositivo navideño de seguridad, que contará con «todos los medios municipales posibles» y que se encontraba a la espera de que el consejo interterritorial que se celebró este miércoles marcara las pautas a seguir en las próximas fechas y apeló de nuevo a la responsabilidad individual de los cacereños. Precisó Licerán que el objetivo es «ofrecer seguridad a las personas» pero también «velar por la salud y para que no se expanda la pandemia ni los contagios en unas fiestas que podrían, si no hacemos bien las cosas, hacernos retroceder en un camino que la ciudad está haciendo bastante bien».
En las últimas semanas, las cifras de contagios se han estabilizado en la ciudad y bajan de forma progresiva. En cualquier caso, Licerán recalcó la importancia de que los cacereños «hagan un último esfuerzo a pesar de que son fechas de encuentros para no volver atrás.
