El segundo día de estado de alarma en Madrid transcurre con una importe presencia policial en todas las salidas posibles de la ciudad, con unos 7.000 agentes que comprueban, en algunos casos uno a uno, si los ciudadanos que pretenden tomar un tren, por ejemplo en la estación de Atocha, tienen una razón justificada para hacerlo. Las multas en caso de incumplir las condiciones establecidas pueden ser de hasta 600 euros. Las medidas impuestas por el Ministerio de Sanidad han sido, paradójicamente, un motivo de alegría para el gremio de la restauración de la capital. A pesar de que se limita el número de comensales y se acorta el horario de apertura de los establecimientos, la Asociación de Hostelería de Madrid prevé que el puente del Pilar será económicamente "muy bueno" en la capital si los madrileños no pueden salir de la ciudad. Prevén un incremento del 25% en la facturación.
La jornada, pese a la incertidumbre general causada por el pulso que durante los últimos días han mantenido el gobierno de la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Sanidad, transcurre sin mayores incidentes, a la espera de la manifestación que Vox ha convocado para protestar contra el ejecutivo de Pedro Sánchez con motivo de la celebración del 12 de octubre. Un mínimo anticipo del tono en el que puede transcurrir esa protesta se vivió la noche del viernes frente a la sede central del PSOE, en la calle de Ferraz, donde varias decenas de manifestantes se reunieron en un clima de elevada violencia verbal.
BOLETÍN OFICIAL DE LA COMUNIDAD DE MADRID
Por su parte, el gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha publicado este mismo sábado en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid una orden que entrará en vigor el lunes y que restringe la movilidad en siete zonas básicas de salud que no quedan afectadas por el estado de alarma porque son municipios de menos de 100.000 habitantes. Se trata de Arganda del Rey, Sierra de Guadarrama, Colmenar Viejo Norte y Valleaguado, a las que hay que sumar tres en las que ya se habían decretado restricciones y que se mantienen a través de la nueva orden, Villa del Prado, Humanes de Madrid y Reyes Católicos.
Lo singular de la orden publicada en el boletín regional es la longitud del preámbulo, que repasa minuciosamente lo acontecido hasta ahora y subraya el acierto de las decisiones tomadas por la Comunidad de Madrid en contraposición con los pasos dados por el Gobierno central.
