El Gobierno ha puesto este martes sobre la mesa un nuevo argumento para rechazar las peticiones de algunas comunidades autónomas de implantar ya el confinamiento domiciliario en sus territorios. Su portavoz técnico para la pandemia, Fernando Simón, ha advertido que aceptarlo en una comunidad implicaría acabar implantándolo en toda España, entre otras razones, "por el efecto dominó que supondría , como ya hemos visto que ha ocurrido con otras medidas".

"Es una medida de gran impacto y que hay que analizar con muchísima prudencia", ha añadido Simón, que tampoco ve aún razones de colapso sanitario que la hagan necesaria.

MANEJO

Fuentes del ministerio de Sanidad admiten que sería difícil de manejar un cierre no homogéneo, por territorios, con comunidades con la economía abierta y otras vecinas con ésta paralizada.

También recuerdan que "no está escrito" que, de entrar en vigor esta medida, sean los presidentes regionales las autoridades delegadas, por lo que el ministro podría recuperar el mando único del que disfrutó en la primera ola si fuera necesario.

Pero sobre todo advierten que la medida no está sobre la mesa porque se confía en evitar a toda costa un escenario que asestaría una puñalada profunda a la economía y que por tanto solo se adoptaría ante una situación extrema. "No hay un solo papel ni en la Moncloa ni en el ministerio donde esté diseñado", apuntan en el círculo de Salvador Illa. Y recalcan que las cifras caminan en sentido contrario, por la bajada de casos en Madrid o la estabilización que se refleja en Catalunya. "No vemos necesario confinar en casa en este momento, ni tampoco hay un clamor en las comunidades, porque los números en Asturias tampoco lo justifican", abundan.

CONSEJO INTERTERRITORIAL

Melilla abrió el fuego de las peticiones de confinamiento el pasado viernes, el lunes se sumó Asturias, el martes Ceuta y Castilla y León ha pedido al Gobierno que habilite esa posibilidad por si se ve obligada a implantarla. A todas les ha respondido ya que no el Gobierno. Las cuatro y alguna más llevaran la cuestión al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) que se celebra este miércoles por la tarde, pero el ministro de Sanidad volverá a responderles negativamente.

La situación de España es cada vez más preocupante. La incidencia ha escalado este martes de 521 a 527 casos y varias comunidades autónomas superan el 40% de ocupación de las ucis con enfermos de coronavirus con Melilla al 64%. Sanidad ha registrado 18.699 nuevos casos y 238 nuevas muertes, una de las cifras más alta de la segunda ola.

MÁS CIERRES DE BARES

El Gobierno quiere que antes de recurrir al confinamiento domiciliario, las autonomías no sólo comprueben el efecto que han tenido las restricciones previstas en el decreto del estado de alarma (toque de queda y confinamientos perimetrales) sino que agoten los intrumentos jurídicos propios. Cataluña, que cerró toda la hostelería dos semanas atrás, ha ralentizado el crecimiento de la curva y de momento no se plantea el encerrar en casa a sus ciudadanos .

Otras regiones que reclaman el encierro como Castilla y León y Asturias no lo han hecho hasta ahora. Ambas lo ejecutarán a partir de este viernes y este miércoles respectivamente. Aragón, con la incidencia disparada a 1.119 casos y la mitad de la ucis ocupadas por pacientes covid, ni siquiera ha llegado a tanto. Este martes ha decidido vetar la actividad no esencial a partir de las 20 horas pero el resto de la jornada mantiene abierta la hostelería.

CALVÓ APUNTÓ AL DÍA 9 PARA DECIR

Por la mañana Carmen Calvo había transmitido la sensación de que el confinamiento domiciliario podría estar más cerca de lo que había dicho el lunes Illa. La vicepresidenta primera, en una entrevista en Canal Sur Radio, pidió esperar hasta el 9 de noviembre para ver cuál es el impacto de las medidas que se han ido adoptando. "No adelantemos fases", reclamó. "Vamos a intentar que eso no llegue. Vamos a ser como siempre contundentes y prudentes al mismo tiempo", agregó.

En la misma línea se pronunció la portavoz del Ejecutivo. María Jesús Montero reclamó a las autonomías medidas "contundentes" para evitar "confinamientos superiores". Es decir, que apuren el margen que tienen con el actual estado de alarma antes de subir un escalón. Pero nada queda fuera del radar. "Hay que ver qué impacto real tienen las medidas adoptadas. El Gobierno ni descarta ni confirma que se puedan adoptar en el futuro otras medidas", sostuvo Montero, quien hizo hincapié en que han de ser también las comunidades las que expresen su opinión en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS).