La embajadora de Buena Voluntad de Unicef Angélique Kidjo ha regrabado la canción 'Pata Pata' de Miriam Makeba, calificada como "la más desafiantemente alegre del mundo", para difundir "información y esperanza" contra el coronavirus.

Unicef, que lanzará la canción este jueves, ha especificado que no se han alterado ni los acordes ni las sílabas de la misma, aunque sí la letra, y que el lanzamiento se produce con "absoluto cumplimiento" de los derechos de autor. Hace más de 50 años que la canción se convirtió en un éxito internacional.

"Pata Pata" significa, literalmente, "Toca, toca" en xhosa. La versión modificada cantada por Kidjo incluye estrofas como "¡Es hora de sentarse!, de no tocarse. Quédate en casa y espera. Tenemos que lavarnos las manos, así que no 'toca-toca' (...) No te toques la cara y mantén la distancia, por favor".

Por otro lado, la canción tiene un significado especial para Kidjo, cuyo amigo, el icono del afro jazz Manu Dibango, murió a principios de este mes de coronavirus.

"Manu me inspiró. Miriam me inspiró. Y 'Pata Pata' me dio esperanza ", ha asegurado Kidjo. "Todos conocemos lo que hay que hacer, pero también sabemos cuánto sufren las comunidades. 'Pata Pata' siempre ha estado ahí para las personas en momentos de lucha. Espero que lo esté una vez más. Y espero que, desde nuestro confinamiento, podamos volver a bailarla", ha agregado.

Esta nueva versión de 'Pata Pata' será de uso libre y Unicef ha animado al público a enviar videos de ellos mismos bailándola y etiquetando al perfil de Unicef África en las redes sociales Tik Tok e Instagram con las etiquetas 'nopatapata' y 'healthyathome'.

Los mejores se incluirán en un video musical que se lanzará a mediados de mayo. Apodada 'Mama Africa', Miriam Makeba fue una cantante y compositora sudafricana, así como Embajadora de Buena Voluntad de Naciones Unidas, que trabajó por la erradicación del hambre, el VIH y la violencia doméstica.

También fue activista por los derechos civiles. Además, Makeba fue una de las primeras músicas africanas en recibir reconocimiento mundial, ganando un Grammy en 1965 y actuando por todo el mundo, desde Johannesburgo a Nueva York, pasando por Lagos o Londres. Asimismo, fue amiga y mentora de Kidjo.