faltan apenas cuatro días para la vuelta al cole más incierta que muchos son capaces de recordar. El próximo jueves se incorporan la mayoría de los escolares extremeños: serán más de 100.000 alumnos de Educación Infantil, Especial, Primaria y Secundaria (el viernes se llegan Bachillerato y algunos cursos de FP). Excepto los más pequeños que se estrenan en el sistema escolar y los que se han presentado a exámenes de recuperación, el resto hace casi seis meses que no pisa un aula, ni asoma por el centro escolar. Y aunque hay muchos deseando regresar, la vuelta se afronta inevitablemente con dudas y mucha incertidumbre, alimentada también por la tardanza en concretar algunas decisiones.

Todo el mundo sabe ya cómo va a empezar el curso. Será de forma presencial en todos los casos (queda por definir qué pasa en esos pueblos que están en fase 2) y siguiendo unas instrucciones y protocolos sanitarios que ya están plasmadas en el papel y entregadas a todos los centros (aunque un poco tarde para muchos). Pero nadie puede vaticinar cómo acabará el curso, aunque ahora ni siquiera se piensa en junio, sino en qué pasará la próxima semana, dentro de quince días o el mes que viene. Pocos descartan la vuelta a la enseñanza virtual, «posiblemente haya que volver a hacerlo», baraja el presidente de la federación extremeña de Ampas, José Luis Casado, pero lo que nadie quiere es que se produzcan contagios dentro de los centros. Que haya que usar las aulas covid-19 destinadas a aislar a posibles positivos o sospechosos hasta que se puedan marchar a sus casas, cerrar un aula o un centro, en el peor de los casos, cuya decisión tendrá que tomarla en la región la administración sanitaria.

Y para que nada de eso pase, aunque Casado cree que será «algo inevitable porque está ocurriendo en distintos espacios a diario en la sociedad», los centros están preparándose contrarreloj para separar espacios, desinfectar hasta el último centímetro, colocar señales y cartelería para no relajarse ni olvidar cuál es la única vacuna posible ahora misma frente al covid-19: el uso de mascarillas, la higiene y la distancia social.

«Lo que más nos preocupa es el uso continuado durante seis horas de la mascarilla, quién no se la ha retirado un segundo para respirar. Y también que alumnos con 12 años guarden siempre las distancias, ya no dentro de las aulas que estará garantizado, sino fuera», dice el director del IES Universidad Laboral de Cáceres.

Es un curso muy complejo, comparten todos, pero no por ello hay que dejar de intentar hacer una vida lo más normalizada posible. «No podemos privar a los niños y jóvenes del derecho a la educación en nombre de nuestros miedos», insiste José Luis Casado. Mañana lunes, los responsables de la Consejería de Educación presentarán públicamente el nuevo curso escolar, darán los datos oficiales y concretarán todas las medidas que trae el raro año académico. Mientras, a continuación, una docente, el director de un centro y el presidente de las Ampas extremeña cuentan cómo afrontan la vuelta al cole más incierta.