El encargado de la empresa de construcción Álvarez Rosas de Navalmoral de la Mata, Emilio Tejerinas Serrano, ha sido el protagonista de un acto de honradez.Esta semana, Emilio, de 55 años, acudió a trabajar a La Chimenea situada entre el parque municipal y la avenida de las Angustias, donde la empresa en la que es encargado está construyendo unas viviendas. A primera hora de la mañana, un empresario de una constructora de Cáceres acudió al lugar, y al marcharse, minutos después, se olvidó una agenda encima de un banco de hacer molduras.A mediodía, Emilio llamó al ayuntamiento para que el oficial de policía encargado de las obras acudiera al lugar, ya que necesitaban cortar al tráfico la calle Agustín Carreño. Sobre la una del mediodía el agente municipal se personó en la zona conocida como La Chimenea y Emilio comentó con él que alguien se había dejado olvidada una agenda y no había vuelto a por ella.Según relató Emilio a LA CRóNICA, ambos se acercaron al banco de hacer molduras y vieron que la agenda contenía varios documentos, así como una cremallera interior. Decidieron abrirla y observaron que contenía billetes de 500, 100 y 50 euros, aunque no sabían qué cantidad total había porque en ningún momento lo contaron.El policía municipal pensó en llevarse el dinero a comisaría, pero, según explicó Emilio, él comentó que primero haría una llamada telefónica porque la única persona que podía ser el propietario era el empresario cacereño. Después de realizar dicha llamada y confirmar que era de él, supieron que la cantidad encontrada ascendía a 1.500 euros.DE VUELTA A SU PROPIETARIOEl propietario del dinero, en declaraciones a LA CRóNICA, comentó que no se percató de la pérdida hasta que recibió la llamada de Emilio. Descubierto el propietario de la agenda, éste facilitó a Tejerinas el nombre de uno de sus empleados, que también trabaja en La Chimenea, para que le entregase el dinero.
