El origen del almacén de materiales de construcción de Hijos de Andrés Pérez, como su propio nombre, es familiar. La gran superficie situada en la carretera de Jarandilla que se encuentra hoy en la que el cliente puede abastecerse de todo aquello que necesite sin necesidad de visitar otro establecimiento mucho difiere de los orígenes. Andrés Pérez hijo explica a LA CRÓNICA como su padre de forma casual comenzó en el negocio y como el ferrocarril que atravesaba Navalmoral fue el detonante de que su familia se estableciera aquí y abandonará Jaraíz de la Vera. "El transporte se hacía por el ferrocarril, no había camiones y en Navalmoral te evitabas el coste de los portes ", apunta. En el año 57 Andrés Pérez padre llegó a Navalmoral; en los inicios se vendían ladrillos, cemento y puntas que se traían de Cantabria. "No podemos hablar de almacén de construcción ", reconoce Pérez. Después se trasladó a "una enramada de madera que estaba situada antes de cruzar a la vía, era un solar de unos 300 metros cuadrados y un patio que mi padre compró por 12.500 pesetas ", explica.SOCIEDAD FAMILIAREn el año 1958, con 17 años, Andrés Pérez comenzó a trabajar con su padre en un aserradero de madera que estaba situado en el barrio del Perchel. Más tarde, en el año 79 su padre dejó el negocio y fue entonces cuando se creo la sociedad Hijos de Andrés Pérez.A pesar de que desde los inicios siempre hubo competidores en el ramo, Pérez afirma que su padre "era un hombre trabajador, buen comercial y una persona afable " y su buen hacer hizo que el negocio se mantuviera con el tiempo. La competencia se mantiene y a la pregunta de qué ofrece este almacén de construcción que no tengan otros afirma, con rotundidad, "solera ".TODA UNA VIDA"Seriedad, formalidad y el ir por el mundo sin engañar a nadie ", ésta es su fórmula. Hijos de Andrés Pérez es una empresa con antigüedad que cuenta con 12 trabajadores. Hoy suministra material a distintos puntos de la provincia de Cáceres, además de a Navalmoral y a las comarcas del Campo Arañuelo, Ibores y La Vera. Semanalmente viaja a fábrica para la adquisición de productos, entre los que se encuentran todo tipo de materiales tanto interiores como exteriores. Desde ladrillos, cemento, tejados y azulejos hasta mesas de jardín y barbacoas.La mayor satisfacción para Andrés Pérez después de 45 años de trabajo es, como él mismo explica, "el ir por la calle y saludar a mis amigos ", y concreta: "Mantener la amistad es mi mayor satisfacción ".