El pasado domingo los aficionados del mundo del caballo se dieron cita en la explanada situada junto a Cetarsa. Los jinetes más madrugadores comenzaron a llegar sobre las once de la mañana, --aunque la competición no empezaba hasta las 12.00 horas--, ante la mirada de la multitud de personas que acudieron a ver el espectáculo.Los primeros en demostrar su maestría con las riendas fueron los más pequeños. Un total de 12 jóvenes se inscribieron al concurso, que consistía en hacer un recorrido en el menor tiempo posible y en el que debían sortear obstáculos, hacer giros y coger cintas. No faltaron las palabras y aplausos de ánimo de un público entregado cuando los caballos se negaban a cumplir las indicaciones de los pequeños jinetes.Jesús Miguel Otero, alumno del picadero de Navalmoral, se alzó con el primer galardón a lomos de Goliat. El segundo premio fue para Eduardo García Hernández y la joven amazona de Navalmoral, Rocío Hidalgo, consiguió el tercer premio con la ayuda de su yegua Rociera.Sólo 13 jinetes y dos amazonas compitieron en la categoría adulta, pues el circuito de un kilómetro, en el que tenían que coger cintas con un lápiz, sortear y saltar obstáculos en el menor tiempo posible, era duro tanto para el jinete como para el caballo.PREMIOS DE ADULTOSUna yegua de nombre Coral hizo que el jinete de Casatejada, Francisco García, obtuviese el primer premio del concurso en la categoría adulta al recorrer el circuito en tan sólo 1,36 segundos. Así, arrebató a su padre el máximo galardón y, José Luis García, --que también montaba a Coral-- tuvo que conformarse con el segundo premio.Las únicas dos amazonas que compitieron no tuvieron suerte, aunque montaban a grandes ejemplares, y el tercer galardón recayó en Juan Carlos Fernández, que concursó en la montura de Nena.Aunque los demás jinetes que acudieron a la explanada no realizaron la gincana también contribuyeron, en todo momento, al espectáculo, mostrando a los asistentes los pasos que sus corceles eran capaces de realizar.