La rápida intervención de los bomberos evitó que el incendio originado en un inmueble de la calle Pablo Luengo se propagara por el resto del edificio, lo que, a decir de miembros del Sepei, "a buen seguro habría ocasionado alguna desgracia". Afortunadamente no hay que lamentar daños personales, gracias en buena medida a la actuación de una pareja de la policía local, que llegó antes al lugar y procedió a cerrar la puerta de la habitación, aislando el fuego y creando un habitáculo estanco. En cuanto a los daños materiales la habitación quedó parcialmente destruída como consecuencias de las altas temperaturas alcanzadas en su interior, dañándose también el pasillo como consecuencia del humo.Los hechos ocurrieron pasadas las cuatro de la tarde del lunes. Se personaron en el lugar dos camiones autobomba y un camión escala de los bomberos junto con cinco efectivos, así como la patrulla de la policía local. Una vez allí los bomberos comprobaron que el fuego partía de una cama, procediendo a su extinción y posterior ventilación. Estas tareas concluyeron a las 17.30 horas.El piso afectado forma parte del bloque de viviendas sito en el número dos de la calle Pablo Luengo y está habitado por un matrimonio inglés que ha fijado en Navalmoral su residencia tras su jubilación. El citado bloque está formado por una veintena de viviendas y linda con otro de características similares
