Esta obra sólo está causando molestias entre los que vivimos en los alrededores de la plaza". Con estas palabras mostraban su malestar ciudadanos de Navalmoral que tienen sus viviendas en las calles colindantes a la plaza del Jardincillo, donde desde principio de año se acometen obras de reforma y saneamiento.Según indicaron algunos vecinos que regresaban a Navalmoral después de unos días de vacaciones, se habían encontrado con la "sorpresa" de que no podían acceder a sus viviendas con su automóvil, "como hacíamos siempre". Además, expresaron sus quejas porque "nadie ha contado con nosotros para hacer la calle en la que vivimos peatonal|".Uno de los vecinos aseguró que casi todos los propietarios de las casas de la plaza del Jardincillo son mayores de edad y requieren atenciones médicas especiales, que en alguna ocasión pueden llegar a depender de una ambulancia que les traslade hasta el centro de salud o al hospital, "y con el cierre al tráfico de nuestra calle, ese servicio no podrá solicitarse al no tener acceso|".Ante esta situación, los vecinos molestos --que según ellos son cerca de 40 personas-- han decidio recoger firmas en contra de las obras de reforma y presentarlas ante el ayuntamiento, alegando que los trabajos que se realizan en la plaza "son cada vez más imprevisibles y sin seguir el proyecto fijado desde un principio".Desde el ayuntamiento ya se explicó hace unos días que se requirió la modificación del proyecto por el arquitecto municipal porque cuando se realizan trabajos "siempre surgen problemas que hay que solucionar, aunque para ello haya que cambiar las previsiones de las obras".