Adrián López Menaya nació en 1958 en la localidad pacense de Fregenal de la Sierra, pero por motivos profesionales reside en Mérida, aunque no hay un fin de semana que no vuelva a la población que le vio crecer. En Mérida, en una tarde de otoño, con unas ovejas en primer término y el inicio de una tormenta al fondo realizó, a contraluz, Ovejas que le ha hecho ser merecedor del primer premio en el concurso de fotografía de la Central Nuclear de Almaraz. Encargado de montajes de vídeo en Televisión Española, Adrián manifiesta que no adora la fotografía por su trabajo sino porque es mágico. Adrián, ¿cómo y cuándo se despertó su interés por la fotografía ?A los 16 años. Por aquél entonces llegó a mi pueblo un chico del que me hice amigo y en su casa aprendí la técnica en un taller de positivado. Me fascinó "la magia " del positivado en blanco y negro. Es un "taller de magia " cuando la copia aparece. Después, me compré mi propio laboratorio y desde entonces no he dejado de hacer fotografías. A partir de ese momento he sido autodidacta, no tengo antecedentes de fotógrafos en mi familia o grupo de amigos, excepto este chico de mi infancia que ocasionalmente pasó unos años en Fregenal. ¿Has pensado alguna vez en dedicarte profesionalmente a ello ?No, yo tengo mi trabajo. Nunca he pensado dedicarme profesionalmente porque el tipo de fotografía que se hace en la zona es de reportaje social. Simplemente es una afición. Es el deseo de captar el momento, de hacer posible que en un futuro podamos ver lo que ha sucedido hace algunos años. ¿Utilizas alguna técnica especial en tus trabajos ?No, siempre he utilizado el positivado en blanco y negro, aunque en esta ocasión -con la fotografía Ovejas - he utilizado el soporte digital. Es la primera vez que utilizo la cámara digital para un trabajo, por eso el positivado me lo han hecho en un laboratorio dedicado a ello. El laboratorio de positivado en blanco y negro es muy laborioso y muy tedioso(me pregunta si yo sé algo de fotografía). En el ordenador, si estás cansado y quieres dejarlo puedes apagarlo y continuar más tarde. Esto no puede hacerse en un laboratorio normal de fotografía. ¿Por qué elegiste 'Ovejas' para participar en el concurso ?No sé, me pareció muy bonito lo que estaba viendo, los colores eran muy intensos. Una tarde de otoño, unas ovejas pastando en el primer término de la fotografía y al fondo empezaba a formarse una tormenta, y por eso la hice y como me gustaba la envié. ¿Pensaste que tu fotografía sería la ganadora ?La verdad es que no. Me sorprendió ver toda una página del periódico anunciando el evento. Además, creía que se presentarían muchos fotógrafos. He ganado otros concursos, como uno que había en Tentudía sobre paisajes y otro del Patronato de Badajoz; pero éste no esperaba ganarlo. ¿Podrías decirnos a cuánto ha ascendido la cuantía del premio ?Sí. el premio fue de 1500 euros antes de impuestos, pero ya te digo que no pensé que ganaría porque este concurso era mucho más amplio que a los demás que me había presentado. ¿Qué fotografía ha sido la última que has realizado ?Ahora estoy realizando una colección de fotografías de personas de Fregenal en su ámbito de trabajo. Creo que tiene un valor humano importante saber dentro de unos años cómo se trabajaba, por ejemplo, en una carpintería o en un banco. Todo fenece, se acaba. Mi trabajo me ha enseñado que la tecnología digital es un soporte que se pierde con el tiempo. Hay muchas formas de recoger testimonio gráfico, pero no sabemos lo que puede permanecer. ¿Qué temas prefieres plasmar en tus instantáneas ?Lo que más me gusta es fotografiar paisajes y cuando son personas me gusta que posen a la cámara, que sepan que la cámara está. ¿Qué es para ti la fotografía ?Para mí la fotografía es luz. En cualquier soporte que realicemos la fotografía, ya sea una cámara digital o una normal, es luz. Cuando hay personas con la fotografía podemos congelarlas, de otra manera pasarían desapercibidas. Es muy difícil congelar el tiempo y a las personas, pero la cámara nos lo permite. Esta es la diferencia que presenta la fotografía respecto al cine. Con la fotografía se detiene el instante de manera artificial.