Los Pequeños Aficionados celebran sus bodas de plata estos Carnavales. 25 años recreando otras culturas, profesiones, personajes, animales, situaciones y estampas más o menos cotidianas. Se han convertido en granos de café, en loros enjaulados, han conseguido que los personajes de la selva llegaran a las calles moralas o que en el desfile no faltaran tartas nupciales. Nunca han repetido un traje, diseños creados para divertir y sorprender. Desde el primer año esta peña ha preparado murgas y chirigotas para denunciar con humor los temas de la actualidad. Han presentado damas, reinas, drag-queen, a cada uno de los concursos carnavaleros edición, tras edición. Al frente de esta agrupación está, y siempre ha estado, Angelines Sánchez. Esta carnavalera defiende firmemente que se debe incentivar la participación de los niños, porque asegura conscientemente que "nos va faltando cantera". ¿Cómo surge la peña Pequeños Aficionados?--Empecé a participar en el Carnaval cuando tenía 14 ó 15 años. Entonces salía con mis amigos y cuando mis hijos cumplieron 2 y 4 años, hace de esto 25 años, fue la primera vez que desfilaron Los Pequeños Aficionados con La boda prematura. ¿Con cuántos componentes empezó?--Eran 16 niños, todos pequeños, de ahí el nombre de la formación. Con los años se fue incorporando gente de otras edades, principalmente alguna madre que quería ayudar, además, aquellos niños fueron cumpliendo años y la edad de los miembros fue aumentando. ¿El número de componentes varía mucho de un año a otro?--Claro que sí. Hay años en los que tienes un montón de gente y otros no, unos repiten y otros se apuntan por primera vez, siempre varían. ¿En qué año el grupo desfiló con más componentes?--En el 1992 íbamos de brasileños, de tinerfeños y seríamos unas 150 personas, otro desfile que recuerdo éramos muchos fue el que salimos con el tema El último emperador. Fueron 3 ó 4 años en los que nos juntamos unos 140 ó 150. ¿Qué premios han conseguido los Pequeños Aficionados?--Antes los premios eran diferentes, el primer año que participamos nos llevamos el primer premio con la boda prematura, se llamaba categoría de murgas, se le decía así y no comparsas, supongo que por la edad de los participantes. Después, a los tres años siguientes ya competimos en la categoría de comparsas y ese año conseguimos un tercer premio, después un cuarto y luego cogimos la carrerilla del primer premio, el segundo... No sabría decirte cuantos premios tienen los Pequeños Aficionados, hubo unos años en los que se concedían en las modalidades de colorido, originalidad, vistosidad y crítica cuando empezó La Agrupación de Peñas. En esos años se reunía la agrupación con los representantes del ayuntamiento y recuerdo que cada uno tiraba para un lado a la hora de preparar el Carnaval. ¿Había muchas críticas?--Sí. Recuerdo que en aquellos años me llamó el fallecido José Bueno Rocha para que fuéramos a la Expo de Sevilla a promocionar el Carnaval. Yo le dije que no teníamos ningún problema pero que prefería que llamara a otras peñas porque sabía que nos iban a criticar y así fue, al final fuimos nosotros no una, sino dos veces. Había muchas tiranteces en aquellos años, porque no ganábamos o conseguíamos el segundo puesto pero yo siempre he seguido adelante, intentando hacer lo que he podido por el Carnaval. ¿Cómo fue esa experiencia del Carnaval de Navalmoral en la Expo de Sevilla?--Estuvimos en el pabellón de Extremadura y a pesar de todas las maravillas que se mostraban en esa exposición, el Carnaval moralo consiguió atraer a muchas miradas, con todas las cosas que había que ver, llamamos la atención. Al hacer balance de estos 25 años de Carnaval, ¿qué es lo primero que le viene a la memoria?--Para mí, el mejor recuerdo es el primer año con aquella Boda prematura.