El alcalde de Navalmoral, Rafael Mateos, se reunió en estos días con la consejera de Fomento, María Antonia Trujillo, para analizar la obra que está realizando la Junta de Extremadura para acondicionar la carretera EX-119 (Navalmoral-Jarandilla). Según manifestó el alcalde, "existe un problema de tipo técnico, y es que en esa obra está proyectada la construcción de una glorieta en la intersección con la Nacional-V (cruce de Moya)". Dicha rotonda no reúne los requisitos que establecen las normas de carreteras del Estado, por lo que el Ministerio de Fomento no autoriza su construcción. Para dar luz verde a esta obra tendría que suprimirse un acceso directo a las instalaciones del Moya.Como solución, el alcalde propone solicitar al Ministerio de Fomento la entrega del tramo de la Nacional-V que hay entre la intersección con la carretera de Guadalupe y la intersección con la carretera de Plasencia al ayuntamiento. De tal manera que éste podría autorizar la construcción de la glorieta según el proyecto de la Junta, al ser propiedad municipal. A cambio el equipo de gobierno pide la permutación de esa vía, que conllevaría un coste económico por su mantenimiento, por la que recorre el centro del casco urbano, la EX-380 (titularidad de la Junta, pero mantenida por el Ayuntamiento de Navalmoral). En este sentido, "el tema quedó encima de la mesa para ser estudiado por la consejería", comentó Mateos.