Cáritas Diocesana ha denunciado que en Cáceres se están produciendo casos de fraude en el proceso abierto desde el 7 de febrero por el Gobierno para la regularización de [wv02]los inmigrantes. Según confirmaron responsables de este órgano de la Iglesia a El Periódico, a los extranjeros se les ofrece la posibilidad de lograr un contrato de trabajo por cantidades que oscilan entre 3000 y 4000 euros.[wv00]En este sentido, Rachid El Quaroui, técnico del programa de inmigrantes de Cáritas, asegura que los contratos "se venden" en el sector agrícola en la zona de Navalmoral y Talayuela. Sin embargo según ha podido saber La Crónica en el juzgado de Navalmoral no se ha registrado ninguna denuncia al respecto.El técnico de Caritas señala "antes una oferta de trabajo se vendía por 60 euros y ahora sube el precio por hacer un contrato con el compromiso por parte del empresario de darle de alta dentro de un mes. Es un secreto a voces" subraya. Este experto añade que los fraudes se están produciendo mediante intermediarios marroquíes o directamente con los empresarios. "Antes era una oferta de trabajo y ahora es un contrato", recuerda.LA VÍCTIMARachid indica que "la víctima" es siempre el inmigrante sin papeles. "Imagínate a uno que lleva tres o cuatro años esperando una oportunidad y luego al final le imponen esas condiciones. ¿De dónde puede sacar ese hombre el dinero si no puede trabajar o ahorrar? afirma.Cáritas denuncia también las dificultades que los inmigrantes se encuentran en el proceso burocrático para regularizar su situación. "En el caso marroquí, piden el certificado de antecedentes penales y no saben que debe ser la persona interesada la que se presente físicamente y pedirlo en su país", señalan. Jesús Moreno, delegado de Migraciones de la diócesis de Coria Cáceres, indica que en su análisis del desarrollo del proceso que en el sector doméstico hay "miedo" a realizar contratos a los inmigrantes. "Si no hacen contratos a las personas inmigrantes se quedan sin un requisito fundamental para normalizar su situación", dice.En cuanto al empleo agrícola según publica El Periódico los empresarios están retrasando la contratación de inmigrantes por estar fuera de temporada.DATOS EXISTENTESSegún los datos que maneja Cáritas Diocesana, en la provincia hay 8.000 a 10.000 inmigrantes documentados, de los que 2.600 pertenecen a la diócesis y unos 800 viven en la capital cacereña.