Numerosas plumas y un sinfín de colores fueron un año más la nota predominante de las comparsas que marcharon por la calle peatonal el domingo y el martes en los desfiles grandes del Carnaval y que se disputaron los primeros puestos en un ranking muy apretado dada la gran calidad de los participantes.Abrieron el desfile del domingo Santa Ana y Los Calyseños, de Cañamero y Santa Amalia respectivamente. Si los primeros vestían atuendos bastante discretos, los segundos lucían unos vistosos trajes de pluma azul y lentejuela en plata, bailando al ritmo de los tambores que desfilaban tras ellos. Tras la primera carroza pasó Baby Boom, conocida por los numerosos niños que la integran, marcándose este año una sincronizada coreografía que hacía temblar el plumaje que portaban sobre los hombros. A continuación desfilaron Los inconfundibles, de Talayuela, escenificando a un grupo de animadoras de rugby (jugadores incluidos) con numerosas cabriolas. Detrás marchaban los primeros clasificados, La década, con majestuosos trajes de falda brillante y gran estandarte sobre cabeza y hombros. Les siguieron los Pequeños Aficionados, que este año escenificaron su 22 Aniversario vestidos de ceremonia y portando grandes tartas, El Monigote, que vistieron resplandecientes trajes verdes para llevar a cabo La tribu del ritual y los pacenses élite, que llevaban una curiosa composición en verde tocada con plumas lilas y rosas. Tras ellos les tocó el turno a Los Amarillos (que fueron los segundos clasificados) que se caracterizaron como Los guardianes del Dorado, de nuevo en verde y plumones oscuros. El turno de cerrar el desfile del domingo en lo que a comparsas se refiere le tocó a Tornado con Dragones y Tinieblas, que un año más puso la nota de ritmo con una coreografía muy ensayada y ejecutada con frenético ritmo. Para llevar a cabo su espectáculo usaron un atuendo: el verde espacial, con grandes brillos y reflejos, diseñado en forma de dragones. Por su ensayada actuación se llevaron el tercer premio.En lo que respecta al desfile de martes el orden fue el mismo, pero con la ausencia de las peña de Cañamero, que solo venía el domingo, y la nueva incorporación de Al Compás, de Puebla de la Calzada, que con Tapiporla pusieron una nota más de ritmo y fiesta.