Según relataban los vecinos pasaban las once de la noche del sábado cuando se percataron del olor a quemado y las llamas que provenían de una vivienda, situada en las confluencias de la travesía Murillo y la calle San Fernando en el barrio del Cerro. Inmediatamente se avisó al 112 y al parque del Sepei pero fue gracias a la rápida intervención de dos vecinos marroquíes que el único inquilino de la casa (un varón de raza gitana) pudo salvar la vida.Los dos marroquíes tiraron la puerta abajo y lograron sacar a su vecino que se encontraba al borde de la inconsciencia. Mientras, otro vecino intentaba que las llamas no se propagaran a las casas colindantes. Personados en el lugar los bomberos y la Policía Local, se procedió a sofocar del todo el fuego de la vivienda que tenía la cocina calcinada, donde al parecer se originó el incendio. Según los familiares, el afectado puso una sartén con aceite al fuego y posteriormente se quedo adormilado mientras, el aceite comenzó a arder.