En su primera internacionalidad el joven deportista de Navalmoral se ha hecho con el título de campeón del mundo de duatlón de larga distancia. Ahí es nada, no se puede pedir más. Es normal que Fermín Vicente señalase después de la prueba que estaba en una nube sin creérselo del todo.El duatleta llegó a Italia con la intención de pisar podio y cumplió con creces. Siempre estuvo en cabeza en las tres mangas de la prueba: 11 kilómetros corriendo, 80kms en bicicleta y 11kms más corriendo, y no pasó apuros para alcanzar la meta después de 4 horas y 5 minutos.Sabiendo de los tiempos de los rivales, el moralo siempre confió en sus posibilidades a pesar de pasarlo mal sobre todo en algunos tramos con la bici soportando temperaturas de unos 34 . Supo controlar a un francés que quiso enganchar con él, y las transiciones entre mangas las hizo con relativa tranquilidad. En la última echó el resto y fue inalcanzable para los participantes entre los 20 y 24 años de edad. En agosto estrenará su título en una nueva prueba de larga distancia en Segovia, antes de correr el Nacional de media maratón.