Las espadas en todo lo alto. Así quedaron después del primer encuentro de la eliminatoria de ascenso a la categoría de bronce entre el Moralo y el Villanueva disputado en el Municipal de Navalmoral. Los locales tuvieron en sus manos afrontar el choque de vuelta en tierras cordobesas con mucha más tranquilidad de lo que lo harán este fin de semana pero se tuvieron que conformar con recibir un tanto cuando ganaban por 2-0. Mejor así, que las confianzas no son del todo buenas. El equipo verde debe continuar con la ilusión de llegar lo más lejos posible sin marcarse ninguna meta y confiar exclusivamente en su trabajo dentro del campo. Así tendrá mucho ganado, como lo demostró en el primer careo con los andaluces.PARTIDO MUY SERIOLos de David Salvo acariciaron la posibilidad de casi sentenciar su pase a la siguiente y definitiva eliminatoria después de tutear y ser superior en varias fases del partido a todo un campeón que llegó a decepcionar precisamente por esa vitola de favorito. Lástima que el Moralo no tuviera el aguante necesario que da la experiencia para matar el encuentro cuando más a su favor lo tenía. Aún así está más vivo que el rival para el envite de vuelta.El de ida estuvo muy igualado en ocasiones de gol y los de Navalmoral supieron aprovechar mejor las suyas. Bajo un sofocante calor, los locales fueron los absolutos dueños de la situación durante los primeros 20' de juego, maniatando a los visitantes y creando acercamientos con peligro. Mediada la primera parte, fueron los andaluces quienes se sacudieron el dominio y llegaron al portal de Carlos Agut con osadía pero a balón parado. En un mismo córner, Juli sacó un cabezazo sobre la misma línea y Dani Baños rechazó un disparo dentro del área pequeña que se colaba en las redes.GOLAZOS PARA SOÑARDespués del descanso, el cuadro de Navalmoral comenzó de nuevo muy fuerte y esta vez encontró la recompensa del gol. En apenas 7' hizo dos. Beni Besale (56') clavó el balón en la portería contraria magistralmente al saque de un golpe franco directo desde la frontal del área; y Fabiani (63') marcó a bocajarro después de una gran jugada de Juli por la izquierda tras el pase por alto al hueco de Tito. La grada (con unos 1.200 espectadores) estalló, pero no fue suficiente para mantener la ventaja. En un saque de banda en largo, el visitante Moyano (70') cabeceó a las redes aprovechándose de un grave despiste defensivo local.De ahí al final muchos nervios moralos y mayor empuje cordobés, aunque ya el marcador fue inamovible a pesar de recibir los de Salvo otro peligroso cabezazo que esta vez repelió uno de los postes. En la vuelta es probable que el Moralo sufrirá, pero a buen seguro que los 90' volverán a ser muy intensos e inciertos.