Alejandro Miguel nació en Navalmoral hace 37 años, una tierra a la que admira y que plasma en muchos de sus cuadros. Pintor autodidacta, afirma que se recuerda "toda la vida pintando ", aunque sus inicios fueron en principio esporádicos y sin llegar a pensar que el lienzo y el pincel llenarían muchas jornadas de trabajo. Su verdadera incursión en el mundo de la pintura y su andadura como pintor artístico vino propiciada de la mano de su esposa, a la que califica como "mi musa ", y considera su maestro al pintor Juan Núñez-Romero Cortés.En los comienzos se dejó atrapar por la técnica impresionista, pero poco a poco fue depurando su estilo hasta conseguir ese realismo que le caracteriza y que puede admirarse en la muestra que hasta el próximo 3 de septiembre estará exponiendo en el Castillo Medieval de Oropesa. ¿Cómo fueron sus comienzos? Se puede decir que siempre había pintado, pero que lo hacía como un hobby, no le daba importancia. Después poco a poco empezó a reclamármelo mi mujer, que es la que inspira todos mis cuadros, es mi musa. Si hablamos de mi andadura como pintor artístico, comenzó cuando conocí a Juan Núñez. él me animó y desde el año 1997 supervisa mi trabajo y me asesora. Empezó con la técnica impresionista y poco a poco sus cuadros fueron convirtiéndose en realistas, ¿qué fue lo que propició ese cambio? Me gusta captar todos los detalles, puede que fuera por eso. Procuro que mis cuadros sean como una fotografía, intento llegar a ella. La pintura realista, al igual que algunas fotografías, tiene un elevado carácter social y reivindicativo. La temática de su obra se centra en Extremadura: sus pueblos, su paisaje, sus gentes... Sí. Me apasiona mi tierra y todo lo que tiene que ver con ella. Es una manera de mostrar nuestras gargantas, pueblos, valles, atardeceres. Ha expuesto en Navalmoral y en varios municipios extremeños. Ahora sus cuadros pueden observarse en la muestra que está realizando en el Castillo Medieval de Oropesa, ¿podemos decir que es profeta en su tierra? . No, conmigo también funciona el tópico de que nadie es profeta en su tierra. Es muy difícil exponer y la pintura no suele estar valorada, la mayoría de la gente tiene un concepto bajísimo. Además, la pintura, como todo, va por modas y mis cuadros distan mucho del arte abstracto, que es lo que prima ahora. ¿Qué es para ti la pintura? Actualmente es el todo. Para mí sería el futuro, una forma de disfrutar trabajando, aunque lamentablemente si tuviera que vivir de esto me moriría de hambre porque hay muy pocas ayudas y además es un hobby bastante costoso. ¿Cuáles son tus próximos proyectos, tus metas? Mi única meta es seguir pintando, que es lo que realmente me gusta y me relaja. Y si hablamos de mis proyectos, el más inmediato es empezar a dar clases de pintura en Talayuela en el mes de septiembre. También tengo previsto participar la próxima primavera en una exposición colectiva en Badajoz.