Confiesa que escribe para contar todo lo que piensa mientras pasea. Su bibliografía está llena de cuentos: El tiempo circular y Diez razones para estar en contra de la Perestroika son los últimos que ha publicado. A finales de junio la Junta de Extremadura le concedió una beca para colaborar durante cinco meses con actividades de la Universidad de Extremadura. Tarea que compagina con la docencia en un centro de Educación Secundaria cacereño y con la realización de un taller literario, que impartirá por tercer año consecutivo, desde ayer, en su ciudad natal, Navalmoral de la Mata. ¿Qué novedades plantea este año para la actividad?--Quiero que en esta ocasión sea más práctico, que los alumnos intervengan más en las clases y así conseguir que estén más motivados a la hora de escribir sus relatos. Además me gustaría que comenzaran a fomentar el juicio crítico, tanto para valorar sus propias obras como las de los demás compañeros del taller. ¿Qué temas se abordarán?--Durante diez sesiones trataremos géneros como la novela, narración, descripción, el cuento, y otros como el dietario, el ensayo, el artículo de opinión, además de explicar cómo escribir un cuento y una novela, así como diferenciar las formas de corregir un texto. ¿Con qué métodos intentará incrementar la participación?--Los alumnos escribirán sus textos, como en ediciones pasadas, y después realizaremos una serie de ejercicios sobre esos relatos: Primero los leerán en voz alta para sus compañeros, porque pienso que así se darán cuenta de los errores más llamativos. Los demás podrán ofrecer propuestas de mejora. Yo haré una segunda corrección, con calma en mi casa y les daré mi punto de vista. Después, harán una reflexión sobre todas las propuestas y cambiarán los que crean conveniente hasta que se encuentren satisfechos con sus textos. En otras ocasiones los alumnos que han participado, ¿mostraban interés por el taller?--Me llena realizar este tipo de actividad, por eso ya es el tercer año que imparto este taller literario. Los 20 alumnos que participan vienen con muchas ganas de aprender cosas nuevas, de conocer distintas formas de orientarse a la hora de expresar sus ideas en un papel. Y además llevar a cabo algo así en el lugar donde me he criado me causa mucha emoción. ¿Qué personas pueden participar?--Los alumnos cambian cada año, aunque algunos suelen repetir. Pero el curso está abierto a todos las personas que sientan interés por la escritura o la lectura de textos literarios. El límite de participación solamente está puesto en las sesiones, porque necesitamos tener un número fijo de alumnos que se compromentan con la actividad. ¿Qué nivel de conocimientos literarios tienen los alumnos?--Con el simple hecho de querer participar en esta actividad, ya son escritores, tienen una gran vocación y sólo vienen a mejorar sus técnicas narrativas, por lo tanto, el nivel es muy alto. Quizá la vocación es lo más importante...--Sí, además este año contaremos con la presencia de Gonzalo Hidalgo Bayal, que hablará sobre los elementos más importantes que deben poarticipar en el género de la narrativa; y Santos Domínguez, que intentará inculcar su amor por la poesía. Al margen de esta actividad, qué otros proyectos tiene en mente?--A finales del pasado mes de junio la Junta me concedió una beca para colaborar con la Universidad de Extremadura. Todos los años se le concede a un escritor extremeño y este año la comparto con Eugenio Fuentes, uno de los novelistas extremeños más reconocidos internacionalmente, y la pintora Lourdes Murillo. También estoy escribiendo una novela, novela-histórica, más bien, ambientada en los siglos XV y XVI. Se centra principalmente en la vida de Mateo Alemán, creador del coro de la catedral nueva de Plasencia.