Javier Sánchez Rodríguez es consciente de que su nombre artístico, Txantxu, llama la atención en su pueblo natal, Navalmoral; y lejos de lo que a primera vista muchos pueden pensar y sin ninguna connotación vasca, la historia de Txantxu arranca en su infancia. Así, explica a La Crónica que de pequeño un amigo pronunciaba mal su apellido y en lugar de Sánchez, él le llamaba "Chánchez", de ahí pasó a ser "Chanchu" y el paso siguiente fue una sustitución de letras, por motivo puramente estético, que no modifica el sonido. Acompañado de su guitarra compone su propia música desde que tenía 15 años y tras tocar en alguna fiesta y en conciertos de amigos; esta noche presenta en el escenario de la casa de cultura su primer trabajo audiovisual Tiempo-Espacio. ¿Qué podremos ver y escuchar esta noche?--Tiempo-Espacio son 15 temas musicales que están acompañados de imágenes, pienso que es algo diferente. Las presentaciones de cada tema son, además de las mías, de David álvarez y de Mario Benedetti. Además, en esta ocasión me acompañará, en algunos temas, el piano de Miguel ángel Pérez; él es un compañero de Almaraz que conocí en el instituto, comenzamos a ensayar y congeniamos a la perfección. ¿Compartís los mismos gustos?--No, él quizá se centre más en la música negra porque dan más protagonismo al piano en el soul. ¿Y los tuyos?--Me centro en la música de cantautor. Ismael Serrano, Quique González y Silvio Rodríguez son mis referencias actuales, aunque he pasado por muchas etapas en las que escuchaba a Los Secretos o a Mikel Erentxun. No me parezco a ellos pero mi estilo sí se asemeja al suyo. ¿Quién o quiénes no te gustan?--Cantautor no sé, pero el fenómeno de Operación Triunfo te aseguro que no me gusta nada. No son músicos porque no tienen creatividad, son simplemente voces, y no todos. Es un tipo de música prefabricada. ¿Te consideras cantautor?--Escribo y canto mis propias canciones y soy de los que les gusta el término cantautor. Prefiero un disco que sólo tenga guitarra y voz que algo muy elaborado. Los cantautores actuales rechazan este nombre porque se tiene el concepto de que está arraigado a los problemas políticos y sociales, pero a mí me gusta más que otros, que prefieren denominarse escritor de canciones. ¿Por qué tu primer trabajo se llama Tiempo-Espacio?--Soy de letras, pero a pesar de eso, estudié el bachillerato tecnológico e inicié la carrera de Físicas. Dentro de ésta soy aficionado a la física relativista, porque es la más filosófica que existe y de ahí he sacado el título para mi primera maqueta. Pienso que el tiempo es mi gran enemigo, el tiempo nos ataca y es muy frustrante pensar que este minuto no lo vas a volver a vivir, no se va a repetir. ¿Te obsesiona?--Me obsesiona tanto porque creo que el tiempo va disminuyendo la esperanza y considero que de la desesperanza absoluta nacen los sueños. ¿Para quién escribes?--Para mi novia Sara. ¿Así que no lo haces para ligar?--No, (risas) siempre dicen que los que llevamos guitarra ligamos mucho, y sí es verdad, aunque más en sitios grandes (más risas). ¿De qué hablan tus canciones?--El tema general es el amor, aunque también escribo canciones sociales. ¿Cada canción tiene una historia?--Sí, son autobiográficas porque escribes sobre temas que has vivido, historias que conoces o que te han pasado. ¿Cuánto tiempo te lleva sacar una canción?--Hay gente que escribe un montón de temas, como puede ser Andrés Calamaro, pero luego se repiten o tienen dos ideas el mismo día y sienten la necesidad de escribir dos canciones que se pueden escribir en una. Me lleva mi tiempo, puedo pasar meses de sequía, pero en realidad cuando me viene una idea, me sale de forma fluida y puedo llegar a escribir una canción en una hora. ¿Cuál es tu meta en el mundo de la música?--Para mí es un hobby, llevo tiempo componiendo y pienso que puede gustar a la gente porque tengo amigos a los que les gusta. Este año voy a comenzar la carrera de Historia y en mis prioridades están mis estudios. No soy de los que se marcha a Madrid, a pasar hambre esperando una oportunidad, como puede ser el caso de la extremeña Bebe, aunque claro, si llaman a mi puerta... ¿Y para esta noche?--Que salga bien el concierto. Tengo un poco de miedo porque en Navalmoral no aceptan a los cantautores, no es un género que triunfe.