En el 2006 hubo en España 132 millones de descargas ilegales de películas de internet y las previsiones para este año se acercan a los 200 millones.

Esta es la cifra que facilitaron ayer los participantes en la primera Mesa del cine, que reunió a productores, distribuidores, salas, entidades de gestión de derechos de autor, defensores de la propiedad intelectual y representantes de las empresas en la red. Esta fue su advertencia: el fenómeno puede "acabar" con la industria audiovisual.

Las cuentas no les cuadran. El año pasado se vendieron menos de 40 millones de DVD legales, según explicó a este diario José Manuel Tourne, director general de la Federación para la propiedad intelectual de la obra audiovisual (FAP).

Esta caída se podría haber frenado si por cada tres descargas ilegales hubiera habido una adquisición legal: el mercado se hubiera multiplicado por dos.

Además, se vendieron 41,5 millones de DVD en el top manta. Solo un millón de cintas fueron intervenidas por la policía.

PRIMERA DE EUROPA Estos datos avalan que España encabece el listado de piratería de Europa occidental con un 32%, siete puntos por delante del segundo país, Italia, con el 25%, mientras que en el otro extremo figura Holanda, con sólo un 11 %. Sin embargo, este informe realizado por la consultora Lek, esconde cierto alarmismo. No incluye a todos los países europeos, ni siquiera a los 27 de la Unión Europea (UE), pero sí a Suiza y el Reino Unido. Por tanto, no figuran Hungría o Rumanía, que se sitúan a la cabeza de la piratería europea.

La razón es que el informe se realizó a petición de la Motion Picture Association of America (MPAA), muy preocupada por las pérdidas que la piratería causa a Hollywood. Y este organismo considera que en los países de la antigua Europa soviética se ve poco cine americano, el más afectado por estas prácticas ilegales.

Los expertos reunidos ayer reconocieron que "contra lo gratis, no hay alternativa", y entienden que hay que ofrecer un producto rápido, amplio, variado y de calidad.

El presidente de la Unión Videográfica Española, Ignacio Puebla, destacó que el suyo es el sector más afectado, calculando en un 2% los daños.