Estremecedora" e "inmensa", es, según la periodista Mercedes Barrado, la última obra de Jaime Alvarez Buiza, Presagio del silencio (Universitas Editorial), que se presentó en la pasada feria del libro de Badajoz.

El editor de la obra, José María Casado, reconoció sentirse muy satisfecho y afortunado porque en Extremadura se sigan editando y publicando libros.

Mercedes Barrado presentó el poemario, que muestra a su autor, según señaló, como un poeta en carne viva, como todos sus escritos, que son hondos, tan contradictorios como tiernos y pasivos, según la información facilitada por el Ayuntamiento de Badajoz.

Este es el sexto libro que publica Alvarez Buiza, colaborador de este diario. En él continúa obsesionado por la meditación sobre el paso del tiempo, que le vuelve en forma de recuerdos. Entre los poemas de Presagio del silencio , hay algunos dedicados a personas ya fallecidas y que fueron importantes para el poeta, y otros dedicados a personas que aún están a su lado.

Estructurada en dos partes, una primera, Mis silencios y yo , acumula los silencios que la vida le ha ido imponiendo. La segunda, Presagio del silencio , aborda a quienes le acompañan en el presente.

Alvarez Buiza, según Mercedes Barrado, es un hombre compasivo, que acumula sobre sus espaldas el dolor de los desheredados, como ha demostrado en sus colaboraciones periodísticas en diversos medios de comunicación. Es también, añadió, un hombre de amigos, alguien que usa el humor para espantar el dolor.

Las reflexiones en torno a Presagios del silencio y su autor fueron surgiendo al hilo de una entrevista que la periodista realizó al escritor en la presentación del libro. Buiza explicó que cada poema lleva una autocita porque no quería poner títulos a los textos, ya que estos se quedaban cortos. Prefería, dijo, resaltar dedicatorias escritas a personas importantes para él.