Las dos hijas ilegítimas del fallecido príncipe Bernardo, padre de la reina Beatriz de Holanda, han recibido la parte de la herencia correspondiente, por valor de 0,8 millones de euros, según publicó el jueves De Volkskrant. Alicia y Alexia llegaron a un acuerdo con sus cuatro hermanastras y aceptaron el dinero a cambio de no reclamar unos inmuebles.