Esperamos sorprender. Si cualquiera tenía la idea de que, por cualquier circunstancia, esto no estaba a nuestro alcance, queremos demostrar que podemos hacer esto y cualquier otra cosa que nos propongamos, siempre que estemos bien dirigidas o asesoradas. Y luego, por nuestra propia cuenta, sacar de nosotras todos nuestros potenciales, porque somos mujeres muy valientes.

Lo dice Petra González Osuna, que se ha puesto a las órdenes de José Manuel Rivero para representar ‘La casa de Bernarda Alba’. José Manuel Rivero no es actor ni director: es educador social. Petra es su alumna, junto a otras quince personas más (catorce mujeres y un hombre) en riesgo de exclusión social.

Algunas trabajaron durante algún tiempo, incluso en el Ayuntamiento de Mérida: pero se acabó.

Añadamos al género la edad y tenemos la ecuación resuelta. Póngase, además, una pandemia que esperamos que no dificulte sus prácticas en empresas (hacen teatro, pero también han montado un ropero solidario que surte a varias asociaciones de la ciudad).

Qué importante es el contexto. En Twitter, hace algunos meses, decía una chica: «Tengo trabajo después de dos años y, oigan, los ataques de ansiedad que me daban por no saber qué iba a ponerles a mis hijas de comer han desaparecido como por arte de magia. Me habían diagnosticado depresión».

Importan los apellidos: hay apellidos por los que no te contratan en ninguna parte. La primera vez que lo leí fue de Estados Unidos: habían prohibido las fotografías en los curriculum vitae. Pero los apellidos hay que ponerlos. Y hay apellidos de negros, como hay apellidos gitanos. Vega, Salazar, Heredia. «Y, claro, lo ven y lo echan para atrás».

¿Y si pierdo el trabajo? El amor, dicen, es lo que mueve el mundo. El mundo lo mueve el dinero, seamos adultos: se lo pueden decir a esas parejas divorciadas porque no llegan las perras, porque uno ha gastado algo de más ese mes y viene una discusión y luego otra y otra y lo que antes era un lunar precioso ahora es una verruga horrible y hubo tanto ruido que al final llegó el final y donde había ingresos ya no quedan y la renta básica no llega para todo.

Nos movemos así: por miedo a perder el trabajo. Pero al menos tienes un trabajo.

Las casas son distintas. Tienen las ventanas más pequeñas, hay más aluminio, más desconchones, cajas en la puerta, y no sé de qué manera se podría arreglar esto, con qué planes de urbanismo, con qué políticas sociales, dónde encontraremos una sociedad, un sistema económico, que permita que todo el mundo tenga un puesto de trabajo digno, con un sueldo digno y unos jefes que le cuiden.

«Les puse ‘Amélie’, pero no les gustó», me contó José Manuel Rivero. Hicieron vídeos, leyeron la Bernarda, les gustó la Bernarda y todas querían ser la Bernarda, pero la Bernarda era Rocío: «por físico, por carácter, por todo». Rocío Gómez Ribas la entiende: «Si ves a la Bernarda desde la época actual, no la entiendes. Pero, si la ves en el tiempo en que se desarrolla la obra, que es justo antes de la Guerra Civil... Las mujeres nacían para casarse, tener hijos, cuidar a la familia... y era una sociedad muy pendiente del qué dirán».

Por eso hay luto, por eso hay ocho años de luto y por eso Lorca es un clásico: porque trasciende los años y es comprendido por personas de muy distinta vida, de muy distinto estrato. Y por eso ‘Amélie’ no es un clásico, sino un pastiche cursi con modos de retratar la soledad anticuados ya en 2001, señor Jeunet.

Voy a recibir cartas por esto.

La actividad parece que se recupera. De lo amateur, pero (creemos que) novedoso en Extremadura (en Sevilla se ha hecho ya con las mujeres del Vacie) a la actividad profesional. Se siguen estrenando textos. Paco Barjola se ha basado en «Las Brujas» de Luis Chamizo para escribir una obra nueva que se estrena este día 5 (justito en pleno puente) a las ocho de la tarde en Malpartida de Cáceres. La dirige Esteban García Ballesteros y la interpretan Marisol Verde y Elena de Miguel. Es decir, De la burla teatro. Y nos cuentan: «Las protagonistas de nuestras brujas, dos muertas, cuentan esta historia desde el presente, aunque vienen del pasado, y comparando épocas, pues resulta que la tradición nos sigue maniatando como antes y los prejuicios siguen siendo perjuicios». Se habla aquí, dicen, «desde el amor, el dolor, la pasión y el odio».

La dedican a las brujas, a las perseguidas, a las quemadas en la hoguera, a las que sufrieron la Inquisición y las inquisiciones: «Por ellas, por sus hijas y por sus nietas».

Reviso la agenda. Otro Lorca, ‘Bodas de sangre’, en Ibahernando, a las siete de esta tarde en la Casa de la Cultura. ‘Laberinto, anatomía del presente’, también hoy, a las ocho y media, en el teatro Alkázar de Plasencia. Gala flamenca, hoy, a las ocho en el teatro cine Festival, de Villafranca de los Barros. Mañana, ‘Deshacia2’ en el teatro cine Monumental de los Santos de Maimona a las ocho. Concierto en ‘streaming’ de la plataforma ‘Directamente’, a las ocho de la tarde, con el grupo Seventh Sun... El domingo, a las 18.00 en Mérida viene ‘Crash, un planeta imaginario’ y el día 8 estarán en Brozas.

Parece que la cosa se va moviendo. Ojalá.