Dos actrices y mujeres imponentes --la norteamericana Cameron Díaz y la australiana Toni Collette-- miden sus fuerzas en la nueva película de Curtis Hanson, En sus zapatos , una comedia con barniz dramático que muestra la doble condición que la sociedad exige a las mujeres: belleza e inteligencia. "Lo que la sociedad pide a las mujeres --aseguró ayer Díaz-- no es nada realista, es demasiado".

El encanto y seducción empleados por Cameron Díaz desde La máscara hasta Los ángeles de Charlie quedaron el pasado viernes en el camerino para mostrar a una actriz comprometida con su trabajo. "La gente me percibe de una forma que yo no comparto", señaló. A su lado, en un hotel de lujo de Madrid, Toni Collette, mostró su atractivo y sus registros interpretativos tras adelgazar los 11 kilos que engordó para ser el patito feo de este filme que se estrenará el día 18.

Producida por el renombrado Ridley Scott (Gladiator ) y basada en la novela del mismo nombre de Jennifer Weiner, En sus zapatos narra los encuentros y desencuentros de dos hermanas opuestas: Maggie (Díaz) y Rose (Collette). La primera, guapa pero inculta, tiene la autoestima muy baja y es la reina de la frivolidad. La segunda, menos agraciada, es una abogada de prestigio pero sin éxito con los hombres que ha renunciado a su juventud para que su hermana la disfrutara.

A Hanson le gustó la historia por la posibilidad de mostrar la evolución de dos personajes, que, en palabras de Díaz, "encuentran la felicidad dentro de ellas y no por su aspecto físico". La conclusión, según Collette, es que "hay que aprender a vivir con uno mismo".