Qué mundos tan diferentes los de ´Los goonies´ y los de ´Chitty Chitty Bang´ y ´Mary Poppins´. Pero qué próximos entre sí. Se asemejan a una llamada a la ruptura del encorsetamiento en que los adultos intentan mantener a los niños; una llamada a la aventura, sea por la vía propia en la película producida por Steven Spielberg o por la acción de otros adultos, como en las otras dos cintas musicales rodadas en los años sesenta. Las tres forman parte de la programación de ´Unos reyes de cine´, que exhibe hasta el domingo a las 12.00 horas el centro cultural Capitol de Caja Duero en Cáceres. ´Los goonies´ es uno de los títulos claves del cine infantil de los años ochenta. Dirigida por Richard Donner, narra la aventura de un grupo de adolescentes en busca de un tesoro perdido. En ´Mary Poppins´ (cinco Oscar ganados de trece posibles, entre ellos el de los efectos especiales), es una mujer (Julie Andrews), encargada de educar a una pareja de hermanos, la que conduce a estos a un universo más libre que el de su rígido hogar inglés. Y en ´Chitty Chitty Bang´, un inventor crea un coche capaz de volar y flotar en el agua. En él se embarca en un viaje con sus hijos, su mujer y su padre hacia un mundo de piratas y castillos.
