Todo listo para que arranque la edición más especial del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, que tendrá una programación más reducida, con un aforo limitado al 75% de la capacidad y con las medidas sanitarias excepcionales para la lucha contra el covid-19, pero volverá a situar a la capital regional como epicentro de la cultura nacional.

El director del festival, Jesús Cimarro, confirmó que los Reyes Felipe VI y Letizia asistirán mañana a la representación de la obra que inaugura la temporada, Antígona, que estará hasta el domingo 26 de julio bajo la dirección del mexicano David Gaitán, quien dirige una versión contemporánea del mito clásico que pretende plantear un desafío intelectual y emotivo al espectador. Aún siendo una representación que ya ha estado en cartel en otras ediciones, esta versión arma esta Antígona en torno a una reflexión sobre la democracia, la justicia y las maneras de gobernar para exponer al espectador ante un desafío intelectual y emotivo sobre problemas de su presente.

«Aspiramos a arrojar un poco de luz en estos momentos que nos están tocando vivir a todos», afirmó ayer Gaitán. El director dibuja a una Antígona como una mujer que duda, que tiene huecos y que no es tanto un emblema de ética y civilidad, sino un ser humano lleno de contradicciones. «Nuestra Antígona no habla tanto de la dicotomía entre leyes divinas y humanas, sino que centra la conversación en torno a las leyes humanas, la libertad, la desobediencia civil, la democracia, la rebeldía, la complejidad», destacó.

La actriz Irene Arcos se mete en la piel de Antígona en su debut en Mérida arropada por Fernando Cayo como Creonte; Clara Sanchís como Sabiduría; los extremeños Isabel Moreno como Ismeme ( la hermana de Antígona) y Elías González en el papel de Guardia; y Jorge Mayor como Hemón, junto a más de 50 figurantes. El director del festival, Jesús Cimarro, destacó que esta edición va a servir para «demostrar que la cultura es segura» y recurrir a ella «como válvula de escape para alejarnos durante unas horas de los problemas ante una situación que nos superó a todos». Por su parte, la consejera de Cultura, Nuria Flores, afirmó que la cultura es una «herramienta de cohesión, de progreso y de encuentro».