Joker ★★★★

Dirección: Todd Phillips

Reparto: Joaquin Phoenix, Robert De Niro, Frances Conroy, Zazie Beets, Brett Cullen

Título original: 'Joker'

País: Estados Unidos

Duración: 118 minutos

Año: 2019

Género: Drama

Estreno: 4 de octubre del 2019

Joker siempre ha sido la némesis perfecta de Batman. Ninguno de sus otros rivales tienen el mismo peso. Ni Pingüino, ni Poison Ivy, Acertijo, Espantapájaros, Ras Al Ghul o cualquiera de los numerosos inquilinos del manicomio Aarkham Asylum.

La película de Todd Phillips ahonda en esa figura dual y viene a explotar como se construye un villano. Se trata de la descripción de un inadaptado social ninguneado o humillado por todo el mundo, que cree vivir lo que no vive y acaba liderando una revuelta callejera sin pretenderlo.

Este Joker conecta con el descrito por Alan Moore en su novela gráfica 'La broma asesina', prolongado en ciertos aspectos por Tim Burton en su primer filme sobre Batman. Pero, sobre todo, está en sintonía con el urdido por Christopher Nolan y el fallecido Heath Ledger en 'El caballero oscuro'. Aquel Joker lideraba también un proceso hacia el caos absoluto.

La fotografía de colores pálidos o metálicos estilo años 70, la interpretación portentosa y equilibrada de Joaquin Phoenix (en un personaje tan estridente) y la música siempre tensa de la violonchelista Hildur Guonadóttir envuelven al personaje en la desbocada extraversión de sus actos y en la intimidad de sus dolores anímicos. Es un Joker patético pero singularmente vivo.

Y ahí salta la chispa, ya que comporta una lectura política algo inocua con división de opiniones entre si el discurso del filme, sobre todo en su tramo final, es o no reaccionario. Tampoco vamos a considerar las historias de superhéroes como el colmo del progresismo con notables excepciones, y algunos de los autores que han renovado las figuras de Batman o Daredevil no son precisamente los más liberales del mundo, caso de Frank Miller. Como ha escrito Sergi Sánchez, Joker viene a ser 'El caballero oscuro' para la era Trump. El mal anida al mal.