TNtacido en Cuenca en 1951, aunque afincado en Mérida, Antonio Gómez rompe con la literatura tradicional para adentrarse en el mundo de la poesía performance. Como muestras: golpe sobre golpe, permitía que el público diese catorce golpes de martillo sobre una fotografía suya, para construir un soneto a martillazos. Otro de sus trabajos, "No soy de un pueblo de bueyes", le llevó por las calles siguiendo una zanahoria que colgaba de su casco, para denunciar el "borreguismo" y homenajear a Miguel Hernández. Además de sus libros y antologías, ha expuesto sus creaciones en cinco ediciones de la Feria de Arco, en Madrid; Tránsito, en Toledo; Arte Hotel, en Sevilla; Puerto de las Artes, en Huelva; o Foro Sur, en Cáceres.

--¿Cómo se define Antonio Gómez?

--Como una persona ingenua y discreta, receptivo a sensaciones que intenta disfrutar con todo.

--¿Un poema visual trata de escribir sin palabras o sacar la poesía de los libros?

--En busca de la comunicación directa con sus receptores la poesía experimental utiliza distintas disciplinas. Uno puede expresarse sin palabras y cada vez es más frecuente encontrar poesía en la calle, en televisión y en la misma publicidad.

--¿Están más cuerdos los escultores o los poetas?

--Considero afortunados a ambos al poder expresarse de forma creativa. La reflexión y la sensatez son virtudes de las que algunos poetas andan faltos, paro imagino que también habrá escultores con esta misma carencia.

--¿Es necesario experimentar en el mundo de las letras o los ismos pertenecen al pasado?

--La experimentación es una actividad que enriquece cualquier ciencia o trabajo. Igual que los materiales, los métodos y las formas evolucionan y avanzan, también se desarrollan las maneras de abordar el acto creativo. Los ismos que en su día actuaron como detonador y abrieron nuevas vías, hoy sólo son referentes.

--¿Hay muchas injusticias con la poesía experimental?

--El desconocimiento hace que se subestime, aunque en la actualidad la actitud hacia ella está cambiando. Los últimos cuarenta años fueron de una continua lucha contracorriente y algunos creadores que participaron intensamente durante esa etapa hoy son desconocidos incluso por muchos seguidores afines.

--¿Tu performance usando una zanahoria sujeta a un casco, que seguías por la calle, no es extrapolable a la política actual?

--No soy de un pueblo de bueyes además de ser un homenaje a Miguel Hernández, es un grito de rebeldía. La respuesta ante toda injusticia debería de ser inmediata, el trato que nos dedica la clase política no puede dejarnos impasibles. La lectura de æ Vientos del pueblo me llevan æ sugiere esta performance, el inconformismo con la inmerecida realidad que la política actual favorece, debería ser motivo suficiente para no resignarnos y mostrar nuestra disconformidad.

--¿Existe mucho farsante en el mundo de la poesía experimental?

--No más que en otra actividad creativa, en la última década se han acercado a su práctica creadores desde la pintura, dibujo, escultura, cerámica, fotografía, diseño y publicidad, la mayoría ha sido con trabajos puntuales y muy pocos han mantenido continuidad. La poesía visual es algo más que un caligrama, un collage, una acertada composición tipográfica o una casual imagen fotográfica.

--Un recuerdo de la infancia

--La biblioteca del Museo de Arte Abstracto de Cuenca. Fernando Zóbel su creador me invitó a visitarla los fines de semana y durante años tuve el privilegio de poder hojear todos los catálogos y publicaciones que el Museo recibía, aunque la mayoría estaban escritas en ingles y francés idiomas que yo desconocía, podría decir que en esa biblioteca se inicia mi educación visual.

--Un viaje inolvidable

--Mi primera salida de casa para un viaje de larga duración fue en auto stop y durante casi un mes recorrí todo el Cantábrico desde San Sebastian hasta Galicia, acababa de cumplir 17 años y era mi primer viaje largo en solitario.

--Un reto como escritor

--Seguir disfrutando con mi trabajo es el mejor de los premios y todo un reto a mantener.

--Una reflexión ante la vida

--La vida es corta y nos complicamos en acortarla más. Algo falla todavía.

--Una anécdota divertida

--Me he afeitado en contadas ocasiones, siempre llevé barba y a veces muy larga y algo descuidada. En un viaje por Marruecos al visitar Chauen conseguí reunir un numeroso grupo de niños que me seguían por todo el pueblo gritándome Alí Babá. Luego me explicaron que no es frecuente en Marruecos ver a una persona joven con la barba tan larga como la mía. A los niños les recordaba al personaje del Cuento Alí Babá y los cuarenta ladrones.

--¿El escritor debe estar al margen de la política o la escritura puede ser un arma de compromiso político?

--En cualquier disciplina a la hora de plantearse un acto creativo la militancia rigurosa puede ser un condicionante, pero no se puede obviar la realidad y mientras esta sea injusta es misión de todos creadores y no creadores el proclamar toda sinrazón.

--Una canción que recuerdas con cariño

--Una canción de los 60 La casa del sol naciente, de The Animals, siempre que la escucho me traslada a mi juventud.

--Un rincón donde sentir la paz

--Antes de asentarme en Mérida, Extremadura me era totalmente desconocida, traía como referencia Los Barruecos y el Museo Vostell, fue mi primera excursión. También pasear por el casco antiguo de Cáceres es todo un placer.

--Un libro de cabecera

--Uno de los libros que he leído y hojeado en más ocasiones es el Refranero español.

--¿Cómo te gustaría que te recordaran?

--Como alguien que intentó disfrutar y ser feliz.

--Un lugar donde reposar para siempre

--En la memoria de familiares y amigos.