La diva del pop está dispuesta a todo para conseguir que se legalice la adopción de su hijo David. Madonna (en la foto, con el pequeño en brazos) ha aceptado el fallo de la Corte Suprema de Malaui que autoriza a una coalición de organizaciones de derechos humanos a supervisar el proceso de adopción del niño.

Las oenegés solicitaron la revisión de la orden de custodia interina del bebé con el argumento de que la cantante había recibido un trato de favor por parte de los jueces africanos, que le otorgaron un permiso provisional para sacar al niño de Malaui. Según la coalición, integrada por 67 entidades, esta decisión viola la leyes nacionales, que durante años han prohibido que los extranjeros adopten niños del país africano.

La reina del pop se ha defendido varias veces en público de las acusaciones de favoritismo en la custodia del pequeño David, y se ha mostrado "sorprendida" por la polémica suscitada en torno al proceso. El niño, que ahora tiene un año, fue adoptado provisionalmente el pasado mes de octubre durante una visita humanitaria que la estrella y su marido, el cineasta británico Guy Ritchie, hicieron para ayudar a los huérfanos de Malaui.