La diversión está en la calle, proclama el festival Anima-T, que llega este fin de semana a su tercera edición en la localidad de Villar del Rey, a unos escasos treinta kilómetros de Badajoz. La posibilidad de asistir a quince actuaciones existe porque los participantes no cobran caché (salvo el transporte, alojamiento y manutención) sino que pasan el platillo o la gorra al público al final de cada actuación.

Los visitantes concederán un premio de 300 euros al artista que más les guste. Los espectáculos de magia, títeres, teatro o circo proceden de Madrid, Cáceres, Ciudad Real o Argentina y se desarrollan mañana y tarde el sábado y el domingo (hoy comenzarán a las 19.30). Además habrá talleres, un mercado artesanal y de alimentación y una exposición del dibujante Francisco Blanco.