Escritores e instituciones culturales lamentaron ayer la muerte del poeta hispano mexicano Tomás Segovia, que murió en la madrugada del lunes al martes a los 84 años. Fue hombre que, en opinión de la mexicana Elena Poniatowska, "dejó huella" en su país de acogida.

El escritor, poeta y ensayista, Premio Extremadura a toda su trayectoria en el 2007, falleció México por complicaciones por cáncer. Al país centroamericano llegó exiliado por la Guerra civil española, y allí desarrolló una importante obra editorial. Admiró a poetas franceses y se midió con Juan Ramón Jiménez y Luis Cernuda. Entre sus principales obras se encuentran La luz provisional (1950), El sol y su eco (1960), Figura y secuencias (1979) y Casa del nómada (1994).