Será en el Recinto Hípico de Cáceres el próximo 20 de junio de 2020 a partir de las 22.30 horas cuando Extremoduro actuará por última vez en su tierra en una gira de despedida de los escenarios que se iniciará en Valencia el 15 de mayo y que acabará en Bilbao el 18 de julio.

Así lo informó el líder del mítico grupo, Roberto Iniesta, y uno de sus más estrechos colaboradores, Iñaki Antón, ‘Uoho’, en una multitunaria rueda de prensa que ambos protagonizaron ayer en Madrid. El precio de las localidades es de 41 y 51 euros en función del lugar del hípico y ya ayer se podían comprar a través de una plataforma digital.

La expectación despertada fue grande ante un acontecimiento histórico para la música española con el adiós definitivo de un grupo surgido en 1987 pero que había parado de trabajar en 2014 para, desde 2016, iniciar una nueva etapa el propio Robe con músicos extremeños.

En total serán ocho ciudades diferentes y no habrá posibilidad de ampliación de fechas. Además de Cáceres, Valencia y Bilbao, están previstas Murcia (La Fica, 22 y 23 de mayo), Sevilla (Estadio de La Cartuja, 30 de mayo), Madrid (5 y 6 de junio, Auditorio Miguel Ríos de Rivas Vaciamadrid), Santiago de Compostela (13 de junio, Monte Do Gozo) y Barcelona (26 y 27 de junio, Parc del Fórum) .

COMPENETRACIÓN / La noticia del adiós de la banda creada y liderada por el músico placentino se conoció ya en la noche del martes. «Para trabajar de la manera en que nosotros hemos trabajado tanto tiempo, es imprescindible tener una compenetración muy especial. Ahora, esa compenetración tan difícil de conseguir y mantener, aunque existe, no es la misma», explicaron a través de un comunicado oficial.

«No queremos irnos sin tocar una vez más las canciones que han contribuido a que seamos lo que somos. (...) Van a ser los conciertos más emocionantes de nuestra vida, pero no tristes, porque pensamos disfrutarlos y exprimirlos para que no se nos escape ningún momento», leyó Iñaki Antón al lado de Iniesta en su comparecencia de ayer.

«Esta no es una despedida como la de los toreros. Podríamos habernos despedido en 2014 (cuando acabamos la anterior gira). Nosotros intentamos ser siempre lo más sinceros y decir lo que pensamos en cada momento. Podríamos volver, pero no es la idea. Dejarlo es lo que sentimos ahora», aseguró el creador extremeño. De hecho, explicaron, la decisión no se tomó hasta que se encontraron en el local de ensayo y se pusieron a trabajar. «Fue cuando nos dimos cuenta que las cosas no eran como antes», insistió Iniesta, antes de precisar que su proyecto en solitario no ha tenido nada que ver en esta ruptura. «Extremoduro siempre ha dependido de sí mismo, no de los otros proyectos», dijo Iniesta.

Explicaron también que serán todos conciertos sin sorpresas en cuanto al repertorio, en sus «tres cuartas partes» con «las canciones más importantes de Extremoduro» y «conjugando lo que quiere oír la gente y lo que nosotros queremos tocar, para no vivir anclados en el pasado, con un recorrido por toda la discografía, toda», explicó el músico.

Extremoduro se marcha dejando detrás 11 álbumes de estudio, canciones para el recuerdo («Somos padres y no podemos elegir una», afirmó Antón) y ventas millonarias a pesar de no haber discurrido en paralelo a la gran industria discográfica, especialmente al principio.

En el tintero se han quedado temas que no han llegado a ver «redondas» para su lanzamiento, pero que, según Antón, «terminarán viendo la luz en algún momento, aunque no como canciones de Extremoduro».