El poeta polaco Czeslaw Milosz, que obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1980, falleció ayer a los 93 años en su residencia de Cracovia. Considerado un símbolo de la lucha contra el totalitarismo, Milosz recibió el galardón de la Academia sueca en un periodo marcado por el pulso que el sindicato polaco Solidaridad mantuvo con el régimen comunista.

Nacido en 1911 en la ciudad lituana de Szetejne, Milosz participó activamente durante la ocupación alemana de Polonia en el movimiento de resistencia antifascista. Acabada la guerra, sirvió como diplomático al Gobierno impuesto por la Unión Soviética. En 1951 cortó los lazos con el régimen y pidió asilo en Occidente, lo que le convirtió en blanco de ataques, tanto del régimen comunista, como de círculos anticomunistas de la emigración polaca. En 1989 volvió a su país.