La delegada de Cultura de Almendralejo, Piedad Alvarez, destacaba ayer de la VII Feria Extremeña del Libro "la respuesta del público", precisamente la razón que motiva "el esfuerzo que se hace desde el ayuntamiento para organizar un certamen de estas características", con un gran número de actividades en la carpa instalada en la plaza de Espronceda y "el esfuerzo económico que ha obligado a ajustar mucho el presupuesto debido a la coyuntura económica, cuadrar el calendario para poder contar con esta participación de invitados porque se celebran muchas ferias de libros en estas fechas", apuntaba Alvarez.

Pero para la concejala delegada de Cultura, ver la carpa llena de público en las presentaciones de libros, "a los librero que han trasladado sus estans satisfechos y, sobre todo, a los escolares con una receptividad inmensa", es el mejor premio a esta esfuerzo.

De los escolares destacaba la "receptividad inmensa porque vienen muy bien preparados desde sus colegios y en ese sentido, tengo que aplaudir la tarea impresionante que hacen sus maestros".

Las mañanas de la feria del libro se dedican a los escolares, con cuenta cuentos, encuentros con escritores y cuentistas, talleres, como el de guión impartido por Irena Cardona, de cómic, con el dibujante Fermín Solís, espectáculos narrativos e, incluso, ensayos, como el de Modesto Rangel, Etica social para estudiantes en un mundo globalizado o el de 19 clases para un mejor pádel o el de José Luis Ferris sobre Miguel Hernández.

En cuanto a las actividades para adultos, empezaron el pregón del escritor Sánchez Adalid, sigue con firmas de libros de escritores extremeños, monólogos y con ilustradores.

Y una actividad muy valiosa para el Ayuntamiento de Almendralejo: las ediciones de Fácil Lectura, destinadas a aquellas personas que por alguna discapacidad psíquica o sensorial tienen problemas para leer. Este año, se presenta la Guía del Parque Nacional de Monfragüe con esta metodología.

Otra novedad de este año es la cocina en la literatura, de la que se encargará el chef Antonio Granero.