El Festival de Teatro de Mérida "pondrá todo el interés y todo el esfuerzo" en ampliar su duración más allá del mes que se había previsto inicialmente para la edición de este año, pero "en ningún caso" se prolongará durante los meses de julio y agosto como en ediciones anteriores.
Según la agencia Europa Press, el recorte tanto en la duración del festival como en el número de espectáculos viene producido por la "reducción tan importante" registrada en las aportaciones de los patronos y patrocinadores de este evento, cuya organización intentará que "la repercusión social y económica sea la menor posible".
El Consejo Rector del Patronato del Festival de Mérida aborda en su reunión de hoy la reducción de presupuesto, pero aplaza la toma de decisiones tanto sobre la programación como la duración del festival a una próxima reunión, que se celebrará con carácter extraordinario "en el más breve espacio de tiempo posible".
Así, el objetivo, según explica el director general de Promoción Cultural de la Junta de Extremadura, Javier Alonso de la Torre, es que la programación, que en principio se había propuesto que rondara el mes de duración, pueda ampliarse algún tiempo más.
Respecto a los espectáculos previstos, Alonso de la Torre aseguró que "en estos momentos no hay ninguna obra segura" y subraya que será en la próxima reunión del Consejo Rector cuando se apruebe la programación.
El dinero
Según los datos de Alonso de la Torre, las aportaciones de los patronos del festival se han reducido en unos 80.000 euros, desde los 1.808.974 euros de 2009, a los 1.730.400 euros previstos para este año 2010, a falta de ser aprobado en la próxima reunión del Consejo Rector del Patronato del Festival de Mérida.
Sin embargo, apuntó que la reducción más importante se ha producido en los patrocinadores, que este año no realizarán ninguna aportación económica, aunque sí de otro tipo, frente a los 91.500 euros aportados el año pasado, o los 450.000 euros de 2008.
Esta reducción "ha generado esa contención económica a la que nos vemos obligados", explica el dirección general, quien resaltó además que "la reducción de los tiempos supone también una reducción de los ingresos en taquilla".
Ante esta situación, Alonso de la Torre detalla que en la reunión del consejo rector, tanto la consejera de Cultura y Turismo, Leonor Flores, como el alcalde de Mérida, Ángel Calle, manifestaron su "preocupación por el posible acortamiento que se pudiera producir en esta edición de 2010, tanto en su programación como en el tiempo que dura".
Así, el director general destaca la "repercusión social y económica tan importante" que este festival tiene en Mérida, en su comarca y en Extremadura tan importante, "que le hacen merecer alcanzar la entidad necesaria para que sus beneficios no se vean reducidos en ninguna medida". En concreto, menciona los beneficios que este festival produce tanto en ocupación hotelera, como en uso de servicios de restauración y de todo tipo.
Por eso, y a propuesta de la consejera de Cultura, el consejo rector decide posponer su decisión sobre la programación y la duración a una reunión extraordinaria de este órgano, para la que todavía no existe fecha.
Mientras se celebra esa reunión extraordinaria, el consejo rector "pondrá todo el interés y todo el esfuerzo en los próximos días, en ampliar los tiempos de programación del festival, en aumentar la oferta de funciones y de espectáculos y la duración", aunque señala que todo ello se intentará "manteniendo siempre como máxima fundamental la calidad en todo aquello que se programe".
"Llevaremos a cabo todas las gestiones que sean precisas para alcanzar en muy breve espacio de tiempo esa ampliación de la programación que permita alcanzar los objetivos", asevera Alonso de la Torre.
